La Central Unitaria de Trabajadores (CUT) de Brasil denunció al Gobierno de Jair Bolsonaro de aplicar una política criminal y de destrucción del ambiente, cuyas consecuencias se reflejan hoy en los incendios en la Amazonia.
Señala que tal escenario se ha agravado por la elección y el mandato de Bolsonaro, quien ha implementado el desmantelamiento de la legislación ambiental construida a lo largo de los últimos 30 años.
Para la entidad sindical, este ataque del Gobierno está relacionado con los intereses de las empresas mineras brasileñas y el agronegocio, y tiene como objetivo destruir el medio ambiente para avanzar en la explotación de minerales y la producción de soja y ganado, así como promover diversas formas de trabajo precario.
El documento alerta además que existen sectores que quieren apropiarse de la rica y natural biodiversidad presente en los territorios amazónicos, atacan a pueblos y poblaciones tradicionales que viven en la Amazonia y la protegen históricamente.
El comunicado remarca finalmente que la CUT estará el 5 de septiembre, Día del Amazonas, defendiendo la soberanía del país y de los pueblos.
Pide a todos los sindicatos, centrales y organizaciones amigas, solidaridad con los trabajadores brasileños en su lucha contra el Gobierno actual que ataca el medio ambiente y los derechos humanos, sociales y laborales.
Al propio tiempo, desde Ciudad Vaticano se reportó que, mediante una carta abierta, los prelados brasileños alzan la voz debido a los incendios forestales en el Amazonas y advierten que ese será un tema crucial en el próximo Sínodo de octubre.
“Junto con el Papa Francisco defendemos el Amazonas de manera intransigente y solicitamos al Gobierno (de Brasil, NDR) medidas urgentes, frente a una agresión violenta e irracional contra la naturaleza, la destrucción sin escrúpulos del bosque que mata una flora y fauna milenaria a través de incendios provocados por el crimen”, sostiene el enfático mensaje. (Con información de PL y ANSA)
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