Icono del sitio Trabajadores

Inocencias perdidas (+ Fotos)

Más de 2 mil niños fueron asesinados o mutilados el último año en medio de conflictos armados. Criaturas que debieron “jugar” a la guerra obligados o que sencillamente fueron víctimas de acciones militares.

 

La información la dio a conocer un vocero de las Naciones Unidas el 31 de julio, y destacó que era el índice más alto desde que hay registros al respecto según una alta funcionaria de esa  organización.

Virginia Gamba, representante especial de la ONU sobre los Niños en Conflictos Armados,  resaltó que esas cifras podían resultar conservadoras, pues solo incluyen los casos verificados por su oficina.

Y agregó que en general “se verificaron más de 24 mil violaciones el pasado año en 20 situaciones de conflictos armados. En particular las referidas a la violencia y abusos sexuales se incrementaron.

“Esto resulta una gran decepción, y es muy triste luego de mantener un trabajo de más de 10 años para aumentar la protección a los niños”, recalcó.

 

Dramática situación

No se trata de movimientos de liberación o guerras en defensa de la soberanía nacional de un país en el que pueden y han participado niños y niñas. No, la situación es dramática porque grupos armados, terroristas o narcotraficantes, reclutan a los menores a integrar sus filas como soldados para que defiendan sus intereses.

 

El drama de los niños soldados es especialmente grave en Nigeria y Somalia. En este último país, el grupo terrorista Al Shabab reclutó el año pasado cerca de 2 mil niños, algunos con solo ocho años de edad.

“El único lugar donde todas las cifras son muy altas y se registran todas las violaciones en todas las categorías es Somalia. Así que quiero hacer un llamamiento, ahora mismo, para que prestemos atención a este país”, alertó Virginia Gamba.

La funcionaria destacó la falta de recursos para hacer frente a esto, y que están sin medios para monitorear las violaciones. Ese personal sufre amenazas y secuestros.

Para concluir, “hay que priorizar la protección y aplicar un enfoque preventivo. Los niños están siendo consumidos por los conflictos y necesitamos apoyo de la comunidad internacional para disponer de recursos suficientes. El compromiso de todos debe ser detener este flagelo”, enfatizó la Representante de la ONU.

 

La paz como única solución

 

 

De acuerdo con el informe del 2018 del Secretario General sobre los Niños en Conflictos Armados, el reclutamiento y el uso de menores persisten, con más de 7 mil menores involucrados en combates de primera línea.

Los incidentes de violencia sexual contra niños y niñas continúan siendo muy frecuentes en las situaciones de conflicto, pero la violación no se denuncia debido a la falta de acceso, el estigma y el temor a represalias.

Los niños son ajenos a las guerras y, sin embargo, siguen siendo sus primeras víctimas. La ONU alerta que la destrucción de escuelas, que también aumenta, se ha convertido en una nueva estrategia de guerra que busca reducir las opciones de los menores.

 

Muchas y dramáticas son las historias recogidas por la prensa mundial. La de Ibrahim, de Chad, conmueve. “Hombres armados llegaron a nuestra escuela. Nos golpearon y dijeron que debíamos seguirlos para que así nuestras familias pudieran estar protegidas”.

Comenzó entonces una historia de tres años cargada de violencia y vivencias nada agradable. A partir de ese momento su infancia fue robada, ya no era un niño, sino simplemente un instrumento de guerra.

El secretario general de la ONU, Antonio Guterres, ha reiterado que la mejor forma de proteger a los niños es la paz, y pidió a todas las partes y a los mediadores que trabajen “en favor de acuerdos políticos que resuelvan los conflictos existentes”.

 

Compartir...
Salir de la versión móvil