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Gesto por la patria de transportista santiaguero (+Fotos)

El gremio del transporte en la provincia de Santiago de Cuba suele marcar liderazgo sindical a nivel de país. Pero no por mostrar un habitual quehacer distintivo, pierde valía el gesto que acaba de protagonizar el taxista Gerardo Delgado Reyes: donar 1 500 pesos al movimiento Mi Aporte por la patria.

Gerardo es feliz al volante de su taxis. Foto: Betty Beatón Ruiz

Este septuagenario chofer de la base de servicios especiales de Cubataxi, encargada de la transportación de pacientes que reciben hemodiálisis, tiene tradición en la entrega de cuantiosas sumas de dinero para el mencionado movimiento sindical.

Ya en 2017 había aportado 1 200 pesos, en 2018 concretó 1 500, y en el presente año repite la misma cifra, con total desprendimiento y regocijo de hacer lo que conciencia y corazón le dictan.

Foto: Betty Beatón Ruiz

“Hay cosas muy sagradas, que uno asume en lo más profundo. Inspirado en el ejemplo de muchos patriotas cubanos, siempre pongo por delante a mi país, cuya soberanía y libertad no tienen precio.

“Cada vez que entrego dinero pienso en Perucho Figueredo y sus versos ‘morir por la patria es vivir’, en Martí y sus palabras ‘patria es humanidad’, y en la contundente frase de Maceo: ‘la patria ante todo’ ”.

“Pero no soy el único, en mi colectivo otros muchos compañeros siguen mis pasos, y ya este año, además de cumplir con el aporte a la patria antes del 1 de mayo, recién entregamos al Sindicato en la provincia otros 330 pesos como contribución especial a la defensa”.

A Gerardo, quien recientemente fue reconocido por sus 50 años de trabajo en el sector del transporte, 48 de ellos como dirigente sindical, lo estimula saber que su esposa, hijos y nietos aplauden su desprendimiento material y lo ven como paradigma de sus vidas.

Igual le complace prestar un servicio eficiente a la población, en particular a los enfermos que día a día lleva de su casa al hospital, viceversa, para que reciban hemodiálisis.

“¿Cuánto vale esa atención médica especializada? ¿Cuánto la educación de mis hijos y nietos? ¿Qué precio tiene la paz, la tranquilidad, la libertad que disfrutamos?

“No siempre es el dinero lo que te da la felicidad, hay cosas más grandes, e incluso más pequeñas, que a veces no apreciamos, esas marcan la diferencia y nos ayudan a vivir con plenitud, por eso, mientras tenga fuerzas seguiré en mi puesto y aportaré todo cuanto pueda para la patria”.

Foto: Betty Beatón Ruiz
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