A lomos de su juego eléctrico, ese que le permitió ganar el Torneo Challenger de Norceca en La Habana y la Copa Panamericana en México, cabalgará la selección masculina cubana de voleibol en la Final Mundial Clasificatoria de la Liga de las Naciones, que se iniciará en Eslovenia este 3 de julio.
Los criollos integrantes del grupo B debutarán contra Belarús el 4 de julio y el 5 desafiarán a Egipto. De ser primeros chocarán en semifinales contra el segundo del apartado A (lo componen los anfitriones, Turquía y Chile). En caso de finalizar segundos retarán al líder de A.
Nuestra formación llegará como una bala a esa justa. Su última conquista en suelo mexicano ante rivales que a nivel regional han elevado su nivel, demuestra que el crecimiento grupales real.
Es justo aclarar que la lid en suelo europeo no será un cómodo paseo. Sin embargo, la capacidad que tiene el voleibol de generar sorpresas invita a confiar en el desempeño de los dirigidos por Nicolás Vives.
El técnico, ex integrante del equipo Cuba que en la década de los 90 acaparó protagonismo a nivel mundial, aseguró que la meta del presente año es capturar una medalla en los Juegos Panamericanos de Lima.
La Liga de las Naciones, que finalizará el 7 de julio, permitirá aumentar el volumen de partidos de rigor. Elemento vital a la hora de asumir retos de envergadura como será la cita peruana, a la que deben asistir las mejores selecciones del continente americano.
