No por repetido el hecho deja de mover los sentimientos y arrancar alguna lágrima. Cuando las almas nobles llegan a los corazones, en gesto de sincero altruismo, es como si el cielo de abriera y cayeran estrellas que iluminan en medio de la penumbra.
Algo así, o bastante parecido, se sintió cuando quienes laboran en la Empresa de Servicios a Trabajadores de Cienfuegos, perteneciente al sector de la Construcción, llevaron alegrías y regalos a los niños que son atendidos en la sala de Oncohematología, del hospital pediátrico Paquito González Cueto, de esa provincia.
El donativo tipificó el día. Niños y familiares sintieron la solidaridad de quienes aportan algo de sus ingresos personales para que esos infantes olviden, al menos por unos momentos, las enfermedades que los quejan.
“Hacemos una coordinación con la sala y donamos artículos que ellos necesitan. También tratamos de hacer un espectáculo de manera que los alegremos”, explicó Belkis Franco, secretaria del buró sindical de entidad, cuyo colectivo acaba de merecer de nuevo la condición de Vanguardia Nacional del Sindicato de Trabajadores de la Construcción (SNTC).
La sonrisa de los niños y familiares que los acompañan, los aplausos y las expresiones de agradecimiento en los rostros fueron el “pago” a tan noble gesto.