Tras las dos victorias en su propio rancho del estadio José Antoni o Huelga (7-3 y 7-5), los Gallos de Sancti Spíritus tienen la corona de la pelota sub 23 al cantío de un gallo, como reza el viejo refrán, pues solo necesitarán imponerse en uno de los tres partidos de este fin de semana en tierra cienfueguera, donde los locales intentarán al menos no ser barridos.
Más allá de la incorporación vital de Geiser Cepeda —estuvo en México para el entrenamiento de altura con la preselección nacional— y del rendimiento sostenido de José Fonte, Rodolexis Moreno, los dos Dismany (Ortiz y Palacios), las palmas en estos dos triunfos en la final se las han llevado los lanzadores, que sin ser de primera línea, resolvieron con creces el reto de ganar dos de los tres juegos camino al título.
El zurdo Adrián Belfast fue un abridor efectivo en el primer encuentro y Jorge Luis Braña-José Félix Castillo se combinaron en roles de relevo para dar la respiración necesaria al éxito del segundo desafío. Y ninguno quizás habría tenido tal protagonismo si no fuera por el azar de la rotación, que dejó para el estadio 5 de Septiembre desde el viernes a las mejores cartas espirituanas tras la salida de su estelar Roberto Hernández.
Yankiel Mauri debe ser la designación de Eriel Sánchez para rematar a una sureños que han bateado con abundancia, pero les ha fallado el importante pitcheo, tanto abridor como apagafuegos; mientras la defensa se ha visto torpe y no solo por errores que van a los libros, sino también por esa mecánica que puede definir play off como estos.
Sin embargo, más allá de los calificativos elogiosos que se ganan merecidamente los discípulos de Eriel Sánchez, va siendo impactante y estimulante ver a una generación de peloteros espirituanos con ganas de regresar a la estelaridad a una provincia que ganó una Serie Nacional élite en 1979, luego terminó en plata en el 2002 y suma tres bronces (2005, 2006 y el de la pasada edición 2019); mientras en campeonatos sub 23 archivaba como mejor premio el segundo lugar del 2015.
Al cantío del Gallo no significa victoria por adelantado, pues los cienfuegueros no son un conjunto que entrega las armas con facilidad. Prima en este pronóstico de campeonato la cohesión, el juego alegre y la disciplina táctica y formal de los espirituanos. El respaldo de su público en el Huelga demuestra que confían en ellos, desde que en la etapa clasificatoria desplazaron en su grupo C al estable Ciego de Ávila, dirigido por Yorelvis Charles.
La sexta edición del certamen Sub 23 está llegando a su final con un campeón de estreno. La fiesta debe prepararse. Es solo cuestión de tiempo, aunque muchos sigan recordando que en la pelota nada es cuadrado y muchos se pueda cantar felicidades antes de tiempo.