La credibilidad total que pueden alcanzar los sindicatos si asumen como propios los problemas del país, del colectivo donde actúan y de sus afiliados, resultó la mejor lección dejada en Matanzas por el Pleno del Comité Provincial de la Central de Trabajadores de Cuba (CTC).
El concepto transformó en clase práctica un encuentro en el que Ulises Guilarte De Nacimiento, miembro del Buró Político del Comité Central del Partido y secretario general de la CTC, reflexionó sobre cómo el movimiento sindical debe conectar los informes económicos con la vida real en los centros laborales, a fin de facilitar el debate y la búsqueda de soluciones favorecedoras de incrementos productivos.
Instó a analizar rigurosamente los renglones del encargo estatal yumurino comprometidos con la nación; y, muy en particular, pidió una mirada crítica al comportamiento del sector turístico, por sus posibilidades para sustituir importaciones, exportar servicios y propiciar encadenamientos.
En ningún espacio sindical, significó, puede faltar el examen a los planes de siembra, a los programas de autoabastecimiento municipal, asuntos, acotó, de alta sensibilidad por su incidencia en la vida cotidiana de los cubanos.
El miembro del Buró Político llamó a transformar los métodos de trabajo en un momento de recrudecimiento total del bloqueo económico, comercial y financiero de los Estados Unidos contra el país, coyuntura, afirmó, en la que la CTC y el movimiento sindical han fijado su posición, y muestra de ello lo son el editorial del 20 de mayo, publicado en estas propias páginas, y el documento Bases para el Fortalecimiento de la Misión del Movimiento Sindical Cubano del proceso orgánico del XXI Congreso.
Se refirió al seguimiento exhaustivo de la alta dirección del Partido y del Estado a los planteamientos emanados de la magna cita de los trabajadores cubanos, y llamó a aprovechar de verdad las asambleas de análisis con los trabajadores para la elaboración del plan de la economía y el presupuesto correspondientes al próximo año.
