Con la mezcla idónea de ímpetu y contundencia la selección masculina cubana de voleibol debutó en el Torneo Norceca Challenger, que tiene como sede el Coliseo de la Ciudad Deportiva hasta el próximo 1 de junio.
La primera víctima del vendaval ofensivo criollo fue el equipo de México, que este jueves planteó un inútil ejercicio de supervivencia. Sólo los habituales errores no forzados de los anfitriones permitieron a los visitantes soñar por algunos minutos con arañar un set que alargara la agonía. Parciales de 25-16, 25-16 y 25-21, sellaron la velada.
Al ataque acapararon protagonismo por la formación local los atacadores auxiliares Osniel Mergarejo (14 ptos) y Miguel Ángel López (11).
Una vez concluida la brega y mientras las sonrisas se desparramaban por la cancha Trabajadores dialogó con Mergarejo, en la actualidad uno de los «martillos» calientes sobre los que descansan muchas de las opciones de victoria de nuestra escuadra.
“Debutar ganando es muy positivo. Más aún cuando por vez primera nos reunimos todos a nivel de equipo. El camino recién comienza pero las sensaciones son buenas. Solo resta seguir compenetrándonos”.
El joven, pero ya experimentado jugador se siente capaz de apoyar a los de menor recorrido. “Les inculco amor, disciplina y dedicación. Este deporte es nuestra pasión, por eso se necesita estar siempre enfocado. Cuando se está bien orientado los resultados llegan”.
La inexperiencia del grupo no es piedra que impida soñar en grande. Basta creérselo cumpliendo con los parámetros que se ensayan. “Somos muy jóvenes, pero los deseos y la garra nos acompañan. Lograr una medalla en los Panamericanos sería algo grande. Debemos continuar esforzándonos y aprender de cada partido. De esa forma el éxito llegará”.
Incursionar en la Liga Argentina le ha proporcionado a Mergarejo un buen número de experiencias. La mayoría están al servicio de la selección nacional. “Jugar allí me ha dado mucho volumen de ataque, no así en la recepción, ya que los argentinos son muy buenos en ese aspecto. Me aprovechan más rematando, sin embargo, la estancia ha sido muy buena”.
Para el eficaz atacante la calidad del voleibol cubano no pasa desapercibida en suelo gaucho. “Reconocen el poderío que tenemos. Les gusta nuestra explosividad, fuerza y saltabilidad. Son armas importantes en la actualidad. Desean que más jugadores se enrolen en sus clubes. Eso demuestra la calidad de los cubanos”, aseveró mientras accedía a tomarse una foto con un niño, que a pesar de no llegarle a la cintura en cuanto a estatura, se sentía gigante de felicidad.
El torneo continúa este viernes con el enfrentamiento entre México y Puerto Rico, mientras Cuba volverá a escena el sábado ante los boricuas, en una presumible final del torneo.