El extenso y provechoso universo que proporciona la recuperación de materias primas precisa hoy obrar sin pausa ante los desafíos y adversidades que afronta el contexto económico y financiero del país.
Resulta aún más imperativo el hecho de multiplicar los esfuerzos actuales dada la alta prioridad que tiene y siempre ha tenido el reaprovechamiento de desechos reciclables provenientes de fábricas, talleres, oficinas, centros educacionales, recreativos, hoteles, establecimientos comerciales y hogares, por tratarse de una actividad que sustituye importaciones, genera exportaciones y coadyuva al encadenamiento productivo.
A tono con tales premisas, los delegados del Sindicato Nacional de Trabajadores de Industrias (SNTI) al recién celebrado XXI Congreso de la CTC, plantearon la necesidad de realizar una amplia campaña de recuperación de materias primas que involucre a todos los sectores.
Fue un acuerdo expresado durante el encuentro con el ministerio del ramo y sus Organizaciones Superiores de Dirección Empresarial, fundamentado en el impostergable impulso que demanda la producción de barras de acero, renglón que ha presentado inestabilidad en la empresa siderúrgica Acinox, de Las Tunas, por falta de chatarra, según afirmó Arturo Rodríguez Font, secretario general del SNTI.
Al ahondar en el tema, señaló que lo anterior repercute de manera negativa en los programas de viviendas e inversionistas debido a que no todas las empresas tributan la chatarra existente en sus predios.
Recabó el aporte que pueden hacer las provincias desde Guantánamo hasta Villa Clara, “así como incorporar a Matanzas y Cienfuegos en el propósito de contribuir a materializar los compromisos de la planta tunera al cierre del actual semestre”.
Como parte cardinal de la campaña —apuntó— es preciso recalcar la exigencia del sindicato, junto con la CTC en los territorios y los trabajadores en el estricto cumplimiento de la Ley 1288 en vigor desde 1975, documento que norma las responsabilidades de las entidades estatales en la recogida, protección y entrega de las materias primas reciclables, algo que no siempre se lleva a cabo.
El reaprovechamiento del papel y el cartón es otro eslabón de suma importancia que tiene entre sus principales destinos la producción de papel higiénico y bandejas para la distribución de huevos.
“No obstante los actuales niveles de recuperación, todavía es insuficiente la entrega de papel gaceta a las plantas ubicadas en La Habana y en el municipio espirituano de Jatibonico”, informó.
Rodríguez Font se refirió, asimismo, al reciclaje de frascos de cristal que se emplean en la medicina natural y tradicional. “Hay una demanda nacional estimada en más de 15 millones, de ahí la necesidad de tributar todo cuanto sea posible para que el país no tenga que importarlos”.
En cuanto a los envases plásticos comentó que resulta apremiante recuperar una apreciable cantidad puesto que la producción se ha visto afectada por dificultades con la importación de resina.
La celebración de las conferencias provinciales del SNTI durante mayo y junio como preámbulo de la cita nacional en septiembre venidero serán escenarios propicios donde reafirmar la realización de esta campaña en tanto contribución a la sustitución de importaciones y al incremento de las exportaciones en algunos renglones “no como una consigna, sino con resultados concretos y medibles”, subrayó el dirigente sindical.
Recordó que uno de los objetivos de trabajo del sector para el año en curso está encaminado a “consolidar la implementación de la política para el incremento de la recuperación de materias primas”.
En Cuba, el reciclaje constituye prioridad de carácter permanente por su vinculación directa con actividades fundamentales de la producción y los servicios.
En la compleja coyuntura económica actual, caracterizada por las tensiones financieras y el recrudecimiento del bloqueo, es ineludible afianzar el carácter prioritario que le corresponde al reciclaje con la participación real de las administraciones de las entidades estatales, las organizaciones sindicales, los trabajadores y toda la población.