En el balance anual del Ministerio de Turismo, efectuado hace alrededor de un mes, el Presidente de los Consejos de Estado y de Ministros Miguel Díaz-Canel Bermúdez exhortó a ese organismo a tener una relación más fluida con la prensa nacional y a diseñar efectivas estrategias de comunicación; sugerencia que encontró rápida respuesta entre los directivos, buró sindical y trabajadores de la agencia Cubacar Aeropuerto (ACA), radicada en el Aeropuerto Internacional José Martí (AIJM), donde la aplicación de la Ley número 113-2012, del Sistema Tributario, propició notables beneficios para la labor de quienes se desempeñan en esa entidad, así como para la protección de sus bienes de producción —los autos— y, sobre todo, para una comunidad que sobrepasa los 2 mil 500 habitantes.
Desde hace mucho tiempo, Pedro Calzada Medina, Pedrín, chofer chequeador para la renta de autos, de la ACA, ha expresado a los miembros de su colectivo la preocupación por el cada vez mayor deterioro de un segmento de la calle conocida como Vía Proyectada, en el reparto Abel Santamaría, del municipio de Boyeros, donde existían enormes baches que dificultaban el acceso por ese camino que, entre otros sitios, conduce a la nave de fregado y mecánica de la agencia, así como a una gasolinera, y es uno de los accesos principales a esa comunidad; amén de que es conducto habitual para los equipos automotores que se dirigen a puntos como Hilatex y la Zona Franca. También perjudicaba a cientos de campesinos de las numerosas cooperativas de producción agropecuaria de esa área.
“Llevábamos a fregar los carros, pero al ser entregados a los clientes traían fango y marcas de agua sucia que se les impregnaban al transitar por dicho tramo. Los turistas los rechazaban exigiendo mayor presencia. Eso afectaba la calidad y teníamos que volver a fregar los vehículos en otro lugar, además de las afectaciones técnicas a los autos producidas por lo irregular del camino”, dijo Pedrín.
Manos a la obra
El entusiasta trabajador de la ACA propuso a la dirección de su entidad resolver el problema valiéndose de los beneficios de la Ley número 113, la cual establece una contribución del 1 % de los ingresos de la empresa para el desarrollo sostenible del municipio, en concordancia con la actualización del modelo económico y social cubano.
De tal manera, y con el eficiente desempeño de la brigada número 12 del contingente Blas Roca Calderío, se acometió la reparación y bacheo de la mencionada arteria por la que cada año circulan más de mil 794 carros de la ACA, además de los autos y ómnibus destinados al servicio de taxis de las terminales 2 y 3 del AIJM y otros vehículos en función del turismo.
“Por ese tramo de calle —unos 700 metros— anualmente se mueven más de 90 millones de pesos cubanos convertibles (CUC), de los cuales más de 40 millones corresponden a las recaudaciones de nuestra organización. Trasladamos la propuesta de Pedrín al gobierno municipal y con el apoyo del presidente del Consejo Popular y de la delegada de la zona, iniciamos las gestiones para solucionar este problema”, comentó Luis Manuel Madruga Gómez, joven ingeniero mecánico, graduado en la Cujae (Universidad Tecnológica de La Habana José Antonio Echeverría).
En la ACA existen en funcionamiento diario más de 100 automóviles/renta, en los que laboran 211 operarios —más de la mitad choferes—, entre ellos mecánicos y los que se desempeñan en las áreas de servicios y administración —los menos—. Esta agencia, dirigida por él hace poco más de un año, pertenece a la sucursal Cubacar Habana, de la cual también es su director adjunto, que contempla las provincias de La Habana, Artemisa y Mayabeque, que, en conjunto, aglutinan a 922 trabajadores del Sindicato de Hotelería y Turismo encargados de la explotación de más de 5 mil 140 carros. Todos pertenecen a la empresa de transporte turístico Transtur S.A.
El emprendedor directivo de 31 años de edad, amigable y excelente comunicador, habló con evidente sentido de pertenencia de las cualidades humanas y productivas del colectivo laboral de la ACA, que “además de cumplir sus planes mensuales de producción hasta la fecha, a pesar de la crítica situación financiera para el mantenimiento del parque de vehículos, realiza significativos aportes en divisas —suma de las propinas de todos— al sistema de salud pública, en particular al Hospital Oncológico.
“Es importante que nuestro centro cumpla, pues si lo hacemos, Cubacar cumple, de lo contrario esa sucursal, que es la mayor de su tipo en el país, también incumple”.
El aporte del 1 % de Cubacar sobre los ingresos brutos por la prestación de servicios representó más de 480 mil CUC el año anterior, cifra que, luego de ser distribuida entre el municipio y la provincia —como prevé la Ley del Sistema Tributario— sobrepasó los 240 mil CUC, lo cual hizo posible la reparación de la mencionada calle, gestión que fue tramitada a través de la Empresa Provincial de Viales, en La Habana.
Yordanis Bernal Guerrero, presidente del Consejo Popular de la demarcación del Wajay —donde radica la ACA— expresó que el reclamo “del bacheo de esa calle es un viejo problema que enfrentaba la comunidad desde hace diez años. Comenzó con un huequito y terminó en un verdadero pantano. Su rehabilitación fue un gran impacto para todos los vecinos y trabajadores del reparto Abel Santamaría. El Grupo de infraestructura del gobierno, tanto en la provincia como en el municipio, desempeñaron un papel esencial en la materialización de la iniciativa de Pedrín, quien fue su mayor impulsor”.
Por su parte, Magali Acosta Martínez, delegada de la Circunscripción número 49, del Consejo Popular Wajay, apuntó que “la solución del problema de la calle Vía Proyectada favoreció a más de 2 mil 500 personas que viven en ese reparto de la periferia capitalina. También benefició a cientos de campesinos pertenecientes a numerosas cooperativas de producción agropecuaria existentes en esta zona. Ahora estamos haciendo gestiones para que por allí transite un ómnibus local. En este logro hay que reconocer el interés del gobierno municipal en Boyeros”.
Eduardo Martínez Otazo, secretario general del buró sindical de la ACA, felicitó “a los trabajadores de la brigada número 12 del contingente Blas Roca, quienes en apenas 15 días resolvieron una situación que nos afectaba a todos. Esto ha propiciado un mejor ambiente en el colectivo y una mayor ganancia para la empresa”.
Hoy Pedrín habla con orgullo de los resultados de su propuesta, y aunque queda un pequeño segmento por concluir, la solución del problema de Vía Proyectada es un logro “de nuestra empresa, de los trabajadores, del gobierno y de todos, gracias a los beneficios que proporciona la Ley número 113 del Sistema Tributario”.