Para seguir respondiendo positivamente a los pedidos de unidad que se enarbolaron en la Asamblea de Guáimaro hace 150 años, o los que realizó Camilo Cienfuegos en aquella “grandiosa manifestación del pueblo” hace seis décadas, en un Primero de Mayo cargado de triunfos y alegrías, el Camagüey hoy tiene retos nuevos para celebrar el Día Internacional de los Trabajadores.
Todos los años muchas razones nos guían a celebrar la fecha, pero esta tiene algo diferente. Se suma a otras históricas: el aniversario 80 de la CTC y la celebración de su XXI Congreso, motivos especiales que nos guían a festejar, explicó Yulián León Rondón, secretario general del comité provincial de la organización.
Y por ello la convocatoria a estas fiestas se leyó en medio de un trabajo voluntario y los trabajadores se comprometen y esfuerzan para cumplir con la entrega de leche, con la producción de disímiles alimentos o materiales de la construcción, sustituir importaciones, o seguir apostando por la innovación hasta la zafra azucarera, “reto que desvelan desde hace años”.
Según explicó el dirigente sindical, otra de las principales acciones será la celebración del encuentro de generaciones, que estará dedicado a aquella histórica visita de Camilo al territorio y las maneras en las que se ha celebrado el Primero de Mayo en toda la provincia. “Queremos, como es costumbre, rescatar la historia desde la base, desde cada centro laboral”, acotó León Rondón.
En la jornada, que se extenderá hasta principios de mayo, habrá reconocimientos a dirigentes y centros con destacada trayectoria, encuentro con veteranos, artistas aficionados y el conocido desfile infantil, único de su tipo en el país, que anuncia cada año lo que se hará luego en la Plaza de la Revolución, el día de los trabajadores.
Se realizarán 44 actos en poblados y bateyes, cada entidad laboral podrá celebrarlo a su manera; y la voz de Fidel Castro Ruz, enarbolando el concepto de Revolución, abrirá estas celebraciones, que también recordarán el discurso de Camilo, aquel primero de mayo de 1959 donde exclamó: “Hermanos camagüeyanos, van muy bien”.
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