La información la expresó la doctora Carmen Rosas Valladares, especialista de Segundo Grado en Neumotisiología en el Hospital Neumológico Benéfico Jurídico, institución de referencia nacional para las enfermedades respiratorias, donde ella labora desde 1982.
Se trata de una enfermedad infecto-contagiosa que se transmite de persona a persona, mediante unas goticas (denominadas flyers) que se expelen al hablar, reír, cantar y toser; acción esta última que representa un mayor peligro para el contagio.
Lo que debe conocerse sobre la TB
Se manifiesta con tos, expectoración, decaimiento, pérdida del apetito y fiebre, por lo general en horario vespertino y en la tarde noche, y esta, precisamente, es una de las razones que les hacen sospechar a los especialistas que el paciente puede ser portador de la tuberculosis. Sobre todo, cuando tales síntomas se prolongan entre 14 y 21 días.
La doctora Carmen Rosas —quien ocupó la presidencia de la Sociedad Cubana de Neumología durante más de 15 años— explicó que ante tal sintomatología es necesario acudir a la atención primaria de salud, al médico de la familia, quien después de un buen interrogatorio y examen físico debe tomar muestras de la expectoración matinal.
Resaltó que Cuba cuenta con el personal entrenado para llegar al diagnóstico y brindar un tratamiento adecuado, al nivel del primer mundo. Dijo que el Estado apoya la alimentación de los enfermos (con la asignación de dietas), que se separan del ámbito laboral, no del social, ya que los antibióticos, las llamadas drogas madres empleadas (rifampicina e isoniacida) permiten que puedan convivir junto a sus familias, lo cual es muy favorable.
Población de riesgo
La además Profesora Auxiliar indicó que en relación con la tuberculosis resulta fundamental tener en cuenta la epidemiología, pues el padecimiento puede asociarse a otras entidades neumológicas crónicas, e incluso debe tenerse presente que los fumadores también tienen tos y expectoración frecuentes.
En cuanto a la población de riesgo, mencionó a los reclusos y exreclusos, los alcohólicos, los diabéticos, los que padecen la enfermedad pulmonar obstructiva crónica (Epoc), muy frecuente en nuestro país por las altas cifras de fumadores.
“La enfermedad simula cualquier otra pulmonar, ¡hasta el cáncer!, entonces en el área de salud lo fundamental es el estudio del esputo —para tener la certeza de que se trata de la micobacteria tuberculosa y no de otra— pues es una enfermedad infecciosa y, por tanto, lo primero es evidenciar la existencia del germen, el bacilo de Koch”.
Cortar la transmisión, fundamental
Agregó que ya una vez con el diagnóstico, el médico indica otros análisis, como por ejemplo la glicemia, por el peligro que corren los diabéticos, y estudios enzimáticos, hepáticos y renales, ya que los medicamentos se metabolizan en ambos órganos y es preciso conocer las condiciones en que están para luego aplicar otras drogas acompañantes.
“El tratamiento comprende siete meses y en una primera fase la enfermera de la familia, o en su lugar el propio médico, tienen la responsabilidad de llevar el medicamento diariamente (son 60 dosis) a la casa del paciente. No se trata de que te doy la pastilla, doy la espalda y me voy, sino es necesario comprobar que el enfermo lo ingiera.
“La segunda fase abarca 48 dosis, tres veces por semana, con una duración de cinco meses. Durante este período al paciente se le realizan rayos X de tórax y un estudio baciloscópico, para verificar si ha disminuido la población bacilar, ya que en las enfermedades infecciosas es esencial detener la cadena de transmisión, sino NO se resuelve el problema.
“Además, se hace un perfil hepático con el objetivo de comprobar si los fármacos empleados (hepato- tóxicos) no han dañado este órgano, se vela también por la hemoglobina y la salud del riñón”.
Recomendaciones
Según la doctora Carmen Rosas la tuberculosis sí tiene cura. No obstante, recomendó que ante un cuadro clínico de tos y expectoración, con una duración de más de 14 días, es necesario acudir lo antes posible a la atención primaria de salud o a otro servicio médico.
De igual manera, sugirió mantener una higiene y alimentación adecuadas, y estar atentos ante la diabetes, enfermedad crónica que produce trastornos inmunológicos, que pueden favorecer cualquier infección.
La profesora destacó que la “logística” para combatir la TB no ha fallado desde el año 1970, del siglo pasado, cuando en el país se puso en práctica un programa nacional —que hoy continúa perfeccionándose— para controlar la enfermedad y evitar su propagación.
¡Ya es hora!
El 24 de marzo de 1882 el doctor Robert Koch anunció al mundo el descubrimiento de la bacteria responsable de la tuberculosis, la Mycobacterium tuberculosis. En homenaje a ese acontecimiento, la Asamblea General de las Naciones Unidas proclamó esa fecha como Día Mundial de la Tuberculosis. Este año se desarrolló bajo el lema de ¡Ya es hora!, en alusión a los desafíos en cuanto a su control y erradicación.
De acuerdo con la Organización Mundial de la Salud (OMS) ello pone el acento sobre la urgencia de adoptar medidas, entre las cuales se encuentran el aumento del acceso a la prevención y al tratamiento y la garantía de una financiación suficiente y sostenible, en particular para la investigación.
Según la agencia sanitaria de la ONU, cada día mueren casi 4 mil 500 personas a causa de la TB y aproximadamente 30 mil contraen esta enfermedad prevenible y curable, considerada la más letal del planeta. Cálculos de la Organización señalan que los esfuerzos mundiales por luchar contra la TB han salvado 54 millones de vidas desde el año 2000 y han reducido la tasa de mortalidad en un 42 por ciento.