Con el título del Grand Prix de Tbilisi, el subcampeón mundial Iván Silva (90 kg), emuló al zar ruso que recibiera el sobrenombre de Terrible y se consolidó en puestos de clasificación olímpica en su división, en tanto la actuación cubana en la cita georgiana se completó con platas de Kaliema Antomarchi (78 kg), Magdiel Estrada (73 kg) y el bronce en Maylín del Toro (63 kg), válido para un quinto lugar por naciones.
Silva ganó sus cinco combates por ippón en este orden: el israelita Li Kochman, el libanés Nacif Elías, el brasileño Rafael Macedo, el uzbeco Davlat Bobonov y el local Giorgi Papunashvili. “Estoy muy feliz porque este torneo es importante en mis aspiraciones de estar en Tokio 2020”, comentó vía Facebook el titular continental, quien sumó así la tercera victoria en este tipo de certamen: Almaty 2016 y Cancún 2018.
Este domingo Kaliema también rubricó una actuación sin precedente en este tipo de certamen y solo se vio superada en la final por la kosova Loriana Kuka —lugar 16 del ranking mundial—, quien le marcó ippón a 52 segundos del final cuando la antillana llevaba el ritmo del combate. “Se me escapó el oro por un detalle, pero sumé puntos clave para el boleto olímpico”, señaló a través de las redes sociales.
En las jornadas precedentes, Estrada había estimulado con su subtítulo —desde La Habana 2014 no vivía un premio como este—, mientras Maylín subió por vez primera al podio de este tipo de justa y enseñó que siempre hay que contar con ella cuando se piensa en medallas a todos los niveles, pues apenas cedió contra la holandesa Geke Van den Berg en un contraataque sorpresivo.
Los únicos judocas que se fueron sin preseas en esta fortísima lid fueron Anailys Dorvigni (57 kg) y Osniel Solís (66 kg). La próxima presentación de este grupo será en el Grand Prix de Antalya, Turquía, el próximo fin de semana (5 al 7 de abril).