Aunque extrañamos el Capitolio para el cierre, la última tarde del VI Clásico Nacional de Ciclismo fue tal y como habíamos conversado antes de salir de Matanzas. “Piki, voy por la tercera victoria para dedicársela a mi madre”, me dijo optimista el habanero Leandro Marcos. “Piki, estoy a punto de concretar el sueño más grande de mi vida”, me comentó el líder de la general individual Frank El Fideo Sosa, un cienfueguero de apenas 20 años.
Y así mismo sucedió. El capitalino demostró sus dotes de velocista —cada vez me recuerda más a su ídolo Joel Mariño— y remató por media rueda a Félix Nodarse en la raya de sentencia, en lo que fue su tercer cetro y el sexto podio del certamen. Mis estadísticas hablan de que arribó a ocho triunfos parciales en Vueltas y Clásicos (dos de ellos en La Habana 2016 y 2019), y ha quedado entre los tres primeros 22 veces.
Al pasar la meta, abrazó a su madre entre sonrisas y llantos, luego besó a Arlenis y finalmente recibió la felicitación sincera de su padre y hermano. “Piki, estaba muy motivado y aunque otra vez terminas sin ganar una etapa, quiero que pongas en tu crónica que esta victoria es de mi equipo y tuya, por la ayuda que me dieron”.
Quizás desconocido para algunos, que solo lo reconocían por la camiseta amarilla, Frank se cambiaba la ropa para ir a la premiación convencido de su felicidad. Allí tuvo el saludo oportuno y vibrante de Eduardo Alonso, el hombre que más Vueltas a Cuba ha ganado. “Cuando me vestí de líder en Topes de Collantes sabía que faltaba mucho por pedalear, pero esto es solo el comienzo de mi carrera”, me dijo mientras recibía solicitudes de fotos y autógrafos.
La jornada de cierre, conocida históricamente como Paseo de los Campeones, reservó solo un atractivo: lucha de los premios intermedios, en los que el artemiseño Nodarse sacó la mejor parte, pues entró segundo en Madruga y tercero en Güines y Cotorro, suficiente para que el espirituano Valido no lo desplazara de ese liderato, a pesar de su primer lugar en Güines.
Por colectivos, Sancti Spíritus retuvo la cima, y en el apartado de montaña, definido jornadas atrás, Yasmani Balmaseda fue el más encumbrado. “Piki, quería más que esta camiseta verde, pero las cosas no salieron como esperaba en una etapa y ahí se me escapó un mejor lugar en la general”, me dijo el artemiseño.
Tras 10 agotadoras jornadas, del grupo de 86 ciclistas que salimos de Baracoa, 66 entramos triunfantes en la capital. Y lo digo así porque todo el que concluya un certamen como este se puede considerar así. Vencer mil 294 kilómetros entre ponches, roturas, caídas, embalajes, frío, lluvia, sol, calambres, deshidratación y decenas de vicisitudes es el más alto honor al que aspiran siempre los ciclistas.
El próximo año nos veremos de nuevo. Una primicia atrapó la despedida. “Piki, en el 2020 tendremos Vuelta a Cuba con carácter internacional. Espero que te prepares para, por fin, ganar una etapa”, me dijo José Peláez, titular de la Federación Cubana de Ciclismo. Y la sonrisa de enamorado del ciclismo volvió a salir.
Clasificación de la etapa:
1.- Leandro Marcos (HAB) 2:42:09
2.- Félix Nordarse (ART) mt
3.- Miguel Valido (SSP) mt
Clasificación por puntos:
1.- Félix Nodarse (ART) 23 ptos
2.- Miguel Valido (SSP) 19 ptos
3.- Kevin Vega (HAB) 17 ptos
4.- Luis Ramírez (GRA) 16 ptos
3.- Juan Cabrera (SSP) 13 ptos
Clasificación de montaña:
1.- Yasmani Balmaseda (ART) 25 ptos
2.- Frank Sosa (CFG) 23 ptos
3.- Pedro Portuondo (SCU) 20 ptos
4.- Yariel León (MTZ) 12 ptos
5.- Yoel Solenzal (SSP) 11 ptos
Clasificación general individual
1.- Frank Sosa (CFG) 30:50:16 horas
2.- Yans Carlos Arias (LTU) a 3:59 minutos
3.- Emilio Pérez (PRI) a 4:15 minutos
4.- Carlos Álvarez (SSP) a 4:24 minutos
5.- Yoandy Freire (SSP) a 6:42 minutos
Clasificación por equipos:
Sancti Spíritus 92:50:16 horas
Habana a 13:28 minutos
Santiago de Cuba a 19:52 minutos