Unos 360 constructores de entidades de varias provincias asumen por estos días en el Reparto Alamar, justo en el conocido Micro X, la puesta a punto de 70 apartamentos, los que dentro de pocos días serán entregados a otras tantas familias hoy evacuadas tras el paso del tornado el pasado 27 de enero por territorio habanero.
Cientos de personas sufrieron consternadas la caída de placas y paredes de sus viviendas, algunas ya bastante deterioradas. Ante ello, la voluntad cubana se hizo presente: acometer la recuperación y dejar mejores viviendas que las que existían. Ese es el lema que en Micro X se fortalece a cada momento.
Allí el escenario del esfuerzo épico y solidario con los compatriotas afectados es en tres edificios contiguos, donados por la Universidad de La Habana, donde radicaba una residencia estudiantil cuyos 240 internos fueron trasladados a las becas de F y 3ra y de 12 y Malecón. La falta de mantenimiento anterior a las edificaciones complican sobremanera esta batalla de hoy.
Ahora en el lugar todo es actividad constructiva. Cienfuegos repara totalmente 15 apartamentos; Sancti Spíritus 10, Camaguey 25 y Matanzas 20, mientras otras empresas nacionales tienen la misión de habilitar balcones, pintura exterior, cerca perimetral y carpintería de aluminio, entre otras tareas también imprescindibles. Al final quedarán conformados 15 viviendas de tres dormitorios, 35 de dos cuartos, y 20 de una habitación, todas con las mejores condiciones.
En los primeros días de labor previeron concluir este 24 de febrero; y hoy consideran ─con mucho optimismo─ que terminarán el 28 de este mes. “Pero el hecho de que concluyamos no quiere decir que de inmediato se pueda mudar la gente, porque queremos despejarlo todo, y que cuando las familias estén aquí no haya constructores”, dijeron a la prensa directivos del sector de la construcción.
“En esta zona hay mucha agresividad por el salitre y a medida que avanzamos surgen escollos, por lo que debemos profundizar para buscar la estructura y hacer un buen recubrimiento al acero”, refieren Robin Vega y Xiomara Canito, arquitecto e ingeniera, respectivamente, ambos de la Empresa de Construcción y Montaje de Matanzas, encargada también de algunas áreas exteriores.
Manos a la obra
“Nosotros llegamos el 9 de febrero, recuerda Lisandra Ballate, una bella y muy joven ingeniera, al frente de las tareas técnicas de los 65 trabajadores cienfuegueros de la ECOA 37. Todo quedará nuevo en los baños y cocina, así como las instalaciones eléctricas, hidráulicas y sanitarias. También repararemos las escaleras.
“Estamos albergados en el Reparto Guiteras y desde las 7 y pico de la mañana y hasta las 8 de la noche laboramos en la obra. Se trabaja duro”, asegura.
Por su parte, 40 constructores espirituanos, de la Empresa de Construcción y Montaje de la provincia yayabera, tienen a su cargo la total reparación de 10 apartamentos. Al frente de ellos está el ingeniero Julio César Marchena. “Estamos albergados en La Lisa ─dijo─ y creemos que la atención puede mejorar. Estaremos hasta cumplir nuestro compromiso, pero no estamos conformes con el sistema de pago que se emplea.
“Es cierto que no serán muchos días ─se prevé hasta el próximo 28─ pero creemos que si ahora trabajamos hasta los domingos no deberíamos cobrar lo mismo que en meses anteriores”, dijo.
Entre los grupos de provincia, los de Camagüey tienen el mayor encargo: 25 apartamentos. El ejecutor de la obra es Rolando Lara.
“Hasta el momento, subrayó, todo marcha a buen ritmo. Los materiales llegan en tiempo y ya tenemos varios apartamentos casi terminados. En sentido general la atención es buena, aunque la calidad de la comida ha tenido altas y bajas.
“Pero hay algo que nos molesta un poco, y es que finalmente se decidió cambiar la carpintería de aluminio, por tanto luego que concluya la empresa encargada de eso, habrá que rehacer parte de lo que ya hicimos en esas paredes”, indicó Lara, acompañado por varios de sus constructores.
Sindicalistas cienfuegueros en Micro X
Una agradable coincidencia en Micro X con el equipo de Trabajadores: Mileisis Castellón Herrera, al frente del Sindicato Provincial de Trabajadores de la Construcción en Cienfuegos, visitaba a sus afiliados.
“Aquí tenemos a una compañera ─Odalys Perera─ que se encarga de las tareas sindicales posibles en una ejecución de este tipo. Pero queremos tocar con nuestras manos el sentir de estos trabajadores. Hoy vamos a estimular con diploma y un módulo de aseo a los 20 más destacados y que más días llevan aquí. Dentro de algunos días repetiremos este reconocimiento, dijo la sindicalista.
¿Qué tal la atención a estos trabajadores?
Los constructores que de otras provincias vinieron a La Habana a brindar su apoyo están albergados en diversos lugares de la capital. Si bien, en sentido general, expresan que la atención no es mala, muy puntualmente salieron a relucir detalles negativos. Altas y bajas en la calidad de los alimentos, falta de agua fría y cubiertos, comida en cajitas y no en bandejas, entre otros elementos.
Susana Riaño, directora adjunta de la Empresa de Atención a Trabajadores No 1 de La Habana, a cargo del servicio, no niega tales planteamientos, e informó sobre las muchas gestiones para en todo momento mejorar las condiciones de atención.
A partir del sábado 23 serían montadas en la obra cinco carpas a modo de facilidades temporales para mejorar el servicio de alimentación. “Con ello, a partir del lunes ─hoy─ podrían utilizarse bandejas y cubiertos, estarían en uso varios tanques para el agua fría, y en sentido general podríamos elevar el confort y la calidad de la alimentación que les ofertamos”, subrayó.
