Hecha a mano. Por muchas manos. Cubierta de pedacitos de telas, unos regalados y otros desgajados de algún antiguo ropero; llena de mucho tesón. Vestida con palabras de amor y cortesía. Así apareció María Parchitos, una muñeca camagüeyana de tela que rompió los números y se enseñorea en la Plaza de los Trabajadores con 30 metros de alto, alrededor de 60 metros cúbicos de relleno y más de 15 mil libras de peso.
El proyecto sociocultural Carsueños se había propuesto la enorme tarea de confeccionarla desde hacía varios meses, pero el sueño se concretó justo para el aniversario 505 de fundada la otrora Villa de Santa María del Puerto del Príncipe, hoy Camagüey.
Tuvieron que emplear cientos de metros de tela, solo para estabilizar su cuerpo 112 metros de soga en su interior, y para cocer los paños que la envuelven unos dos conos de hilo, de 10 mil metros, y otros 50, de 500 metros, como explicó Carmen Soto, directora del grupo, a Juventud Rebelde.
Y llegó el día. Y junto a Lidis Lamorú se presentó la creación. Y la plaza se desbordó de niños rebosantes de alegría; de padres absortos con la muñeca; de muchos camagüeyanos que no querían perderse la obra, que bien cabe en un apartado de los récord Guinness, como la muñeca de trapo más grande y pesada de su tipo en el mundo.
Carsueños acumula ya 15 años de creado y María Parchitos no ha sido su única tarea compleja. Ya se aventuraron a diseñar un ejemplar de La Edad de Oro, con un gran formato, una minimuñeca Leonor, de solo 2,2 centímetros de altura y con menos de una onza de peso, y otra Leonor, esta vez gigante, que medía 16 y 22 metros que fue presentada en la semana de la cultura del 2010.
