Avanzar en una batalla contra el tiempo e intensificar el restablecimiento de la vida laboral tiene absoluta prioridad entre los trabajadores de la Empresa Integral de Servicios Automotores (EISA-Emoto) en La Habana como respuesta para salir adelante tras los daños ocasionados por el tornado que golpeó varios puntos de la capital cubana en la noche del domingo 27 de enero.
En tan solo unos segundos quedó transformada de manera violenta la imagen de esa entidad del municipio San Miguel del Padrón. Apenas comenzaba la mañana del lunes 28 cuando ya todo el colectivo le entraba “con la manga al codo” a la recogida de escombros, cristales de las ventanas, tejas de fibrocemento derribadas y muchos otros desechos diseminados tras el azote del meteoro.
“Hemos tenido que trabajar duro” asegura Belkis Martínez González, directora de esa unidad empresarial. “De inmediato iniciamos la limpieza de todas las áreas afectadas, restablecimos el servicio de agua potable, fue activado un grupo electrógeno que nos suministra electricidad y quedó protegida la materia primas y otros recursos en los almacenes tras la caída de la cerca perimetral.
Considera que “la organización y la disciplina durante las acciones restauradoras ha sido un factor determinante para que todos nuestros talleres ya estén funcionando”. A modo de ejemplo mencionó la asistencia técnica, reparación, reconstrucción y remotorización que reciben los vehículos de servicios necrológicos, ambulancias, carros pipas para agua y colectores de basura y ómnibus Diana, entre otros de diferentes sectores priorizados.
Si bien se aprecian avances en el restablecimiento de algunas áreas, aun queda trecho por andar, sobre todo en materia de construcciones en los techos de las oficinas y las cubiertas de los almacenes y talleres, aclara Belkis. “Esta misión –dijo- la asumirá una Cooperativa no agropecuaria con el apoyo de una brigada integradas por trabajadores de EISA”.
No ha habido tregua aquí y cada quien ha tenido la responsabilidad de ordenar trabajado, subraya la joven directora tras recordar la visita que recientemente les hiciera el Presidente de los Consejos de Estado y de Ministros Miguel Díaz-Canel Bermúdez durante un recorrido por objetivos económicos y localidades habaneras afectadas por el implacable fenómeno atmosférico.
“Nos dio mucho aliento, conversó con los trabajadores y se interesó por los daños en nuestras instalaciones y los esfuerzos que hemos realizado aquí”.
Si alguna frase resume el empeño colectivo en esta difícil jornada es la expresada por Jorge Veloz, soldador con 52 años de labor en su oficio. “El tornado pasó y destruyó muchas cosas, pero nosotros somos otro tornado para reparar tanto desastre y que todo quede mejor que antes, como ha expresado nuestro Presidente”.