Por Betty Beatón Ruiz y Juanita Perdomo Larezada
Jornadas de jolgorio popular se viven en todo el territorio santiaguero a las puertas de la celebración aquí de los 60 años del triunfo de la Revolución que tendrá lugar el 1 de enero, coincidiendo con la fecha en que, en 1959, el Comandante en Jefe Fidel Castro Ruz anunció al mundo, el fin de la dictadura imperante en la nación.
En los nueve municipios de la provincia se desarrollan ferias agropecuarias e industriales con las ventas de productos de alta demanda, además de actividades culturales con galas y conciertos de afamados artistas santiagueros y procedentes de La Habana, entre los primeros El Septeto Santiaguero, y entre los segundos JG (Juan Guillermo) y su Grupo.
Una de las acciones que mayor interés genera entre los santiagueros son las cenas organizadas en restaurantes y cafeterías, principalmente en la zona de Enramadas, principal arteria comercial de la ciudad de Santiago de Cuba, área exclusivamente peatonal, donde por estos días las instalaciones gastronómicas se lucen con sus ofertas, muchas de las cuales se pueden consumir en mesas engalanadas bellamente y colocadas en plena calle.
Esta singular propuesta, que convida a la familia santiaguera a reunirse y compartir sanamente, se extenderá hasta el próximo 2 de enero, a lo que se suman otras iniciativas como la dedicatoria de los dos primeras jornadas de 2019 a los jóvenes, y a las niñas y los niños, respectivamente, para quienes se diseñan opciones de su interés, con el concurso de la Unión de Jóvenes Comunistas (UJC) y otras organizaciones juveniles.
En el área del parque Céspedes, y como telón de fondo el antiguo Ayuntamiento de la ciudad, desde cuyo balcón central Fidel proclamó la victoria de la Revolución el 1 de enero de 1959, se monta ya la tarima para la realización de la gala político-cultural que se tendrá lugar allí, minutos antes de la Fiesta de la Bandera.
Única de su género en Cuba y en el mundo, la fiesta de la bandera es el acto con el que se recibe el año nuevo en la ciudad de Santiago de Cuba, momento que además, marca en el imaginario popular la creencia de que el nuevo periodo por venir será mejor o peor en dependencia de la forma en que ondee la bandera.
Esta festividad centenaria tuvo su origen cuando el santiaguero Ángel Moya concibió la idea de regalar a la ciudad la primera bandera cubana que debía ondular oficialmente en el edificio municipal, una vez proclamada la república libre y soberana.
El 31 de diciembre de 1900, a las 12.00 de la medianoche, Don Emilio Bacardí Moreau, primer Alcalde de Santiago de Cuba instituyó la llamada “Fiesta de la Bandera”, izando a dicha hora, en el mástil del Ayuntamiento, una bandera cubana de grandes dimensiones a la par que se cantaba el himno nacional, devenido tradición patriótica que en este año tendrá como peculiaridad ser la antesala de la celebración del aniversario 60 del triunfo de la Revolución.
