Por Juan Dufflar Amel y Yimel Díaz Malmierca
El Hospital Cubano de Dunkhan, bajo la atención de médicos y especialistas de la isla, es un icono de las relaciones entre nuestros dos países. Cuba puede sentirse orgullosa de haber preparado varias generaciones de especialistas de excelencia, manifestó a Trabajadores Rashid Mairza Mahmoud All-Mulla, embajador de catarí en La Habana.
El diplomático reconoció que el sistema de salud cubano cuenta con el respeto y prestigio del mundo: “Ello condujo a la construcción de ese moderno centro hospitalario donde prestan valiosos servicios 450 médicos, enfermeras y personal técnico de Cuba. Debido a su buenos resultados se ha convertido en un hospital de referencia para la región y en dos ocasiones (2015 y 2018) ha recibido el Premio a la Excelencia en Enfermería Press Ganey”.
En exclusiva con este diario, a propósito del 140 aniversario de la fundación del Estado del Golfo por el Emir Jasim Bin Mohamed Al-Thani, en 1878, el diplomático árabe destacó los logros alcanzados por su país en los últimos años, etapa que calificó como de prosperidad, desarrollo económico, político, social y humano.
Entre los avances del 2018 resaltó el afianzamiento de un sistema educacional de calidad — actualmente ocupa el primer lugar en el mundo árabe y el cuarto a nivel mundial, refirió—; así como la consolidación de la producción y exportación de gas licuado: “Catar tiene la segunda mayor producción del mundo y es tercera en cuanto a reservas mundiales del gas”.
Otros sectores en los que han trabajado intensamente es en el desarrollo de la infraestructura necesaria para la Copa Mundial de Fútbol del 2022 (en un país árabe por primera vez); y de la ciencia y la técnica: “En el año 2021Catar producirá, de manera comercial, el primer vehículo electrónico basado en energía limpia. Será una contribución a la preservación del medio ambiente, tema que recibe permanente atención del Gobierno”.
Rashid Mairza explicó además, al alto nivel alcanzado en los indicadores sociales, en el respeto a los derechos humanos y en el cuidado a la salud de los cataríes y también de los trabajadores y residentes extranjeros. A partir de un sistema gratuito, la nación llegado a ocupar el primer lugar entre los países árabes.
En cuanto a política internacional enfatizó la amplia colaboración con Naciones Unidas y el activo papel del Estado en la solución pacífica de los conflictos regionales y mundiales, por los que muchos, dijo, acuden a Catar solicitando su intervención como mediador entre las partes beligerantes.
Al abordar las relaciones con Cuba, recordó que ya hace cinco años que fue designado embajador, etapa en la cual los vínculos bilaterales han tenido importante desarrollo. Recordó la visita del emir Tamim Bin Hamad Al-Thani a la Mayor de las Antillas, en el 2015, momento en el que se firmaron importantes acuerdos, así como los intercambios entre ministros y personalidades de ambos países.
Entre Catar y Cuba existen buenos niveles de colaboración, de consultas políticas, y de voluntad de ambas partes para continuar desarrollándolas. También en el entorno de las organizaciones internacionales.
Al nivel económico destacó que las relaciones marchan bien, y que la parte cubana ha presentado varias propuestas de inversión en la Isla, las cuales están siendo evaluadas por su Gobierno para encaminar el financiamiento acordado de 2 mil millones de dólares, principalmente en los sectores del turismo, la energía, y la salud. Además se trabaja en la implementación de vuelos aéreos directos entre Doha y La Habana.
“Deseo felicitar al Gobierno y al pueblo de Cuba por el proceso electoral que tuvo lugar de manera cívica y democrática—concluyó el embajador Rashid Mairza—; y al presidente Miguel Díaz-Canel, por haber asumido el Gobierno, confiamos en que seguirá el camino de la Revolución iniciado por el líder Fidel Castro”.
