Con un multitudinario acto de solidaridad con Venezuela concluyo la XVI Cumbre de jefes de Estado del Alba-TCP que tuvo lugar este viernes en la capital cubana y que contó con la presencia de mandatarios y representantes de los países miembros del organismo regional.
La jornada de clausura y el acto de recordación de los 14 años de creada la Alianza se efectuó en el Palacio de las Convenciones. Estuvo encabezada por Raúl Castro Ruz, secretario del Partido Comunista de Cuba; Miguel Diaz-Canel Bermúdez, presidente de los Consejos de Estado y de Ministros; y Nicolás Maduro Moros, presidente de la República Bolivariana de Venezuela.
También asistieron los mandatarios Evo Morales (Bolivia) y Daniel Ortega (Nicaragua); los primeros ministros Ralph Gonsalves (San Vicente y Las Granadinas), y Roosevelt Skerrit (Mancomunidad de Dominica) y representantes de los Gobiernos de Antigua y Barbuda, Granada, San Cristóbal y Nieves, El Salvador, Haití y Surinam.
El Alba-TCP tiene el deber de ser una plataforma donde se integren los movimientos progresistas de la región, dijo el canciller de la Mayor de las Antillas, Bruno Rodríguez Parrilla, quien dio lectura a Declaración Final de la XVI Cumbre.
El documento recordó el encuentro fraterno entre Fidel Castro Ruz y Hugo Chávez Frías, en 1994, momento en que se sembró la semilla del Alba como proyecto de integración. Los firmantes reiteraron además el compromiso del organismo con un orden internacional que defienda el multilateralismo y la concertación como forma de enfrentar la injerencia y la dominación históricamente impuesta.
Entre otros asuntos, el texto reafirmó la necesidad de respaldar a la Celac como mecanismo de concertación regional, así como el derecho de Venezuela, Nicaragua, y Cuba a la autodeterminación, sin injerencias ni amenazas extranjeras de ningún tipo.
Maduro: El Alba está de pie
Las palabras de cierre de la noche estuvieron a cargo del presidente venezolano Nicolás Maduro, quien afirmó que la Declaración Final muestra buena parte de lo que es el consenso vivo del pensamiento revolucionario de los rebeldes del siglo XXI, esos que cada uno de nosotros representamos, dijo.
Esta Cumbre ha sido intensa, comentó, fue televisada en español e inglés por TeleSur y las televisoras hermanas, y gracias a eso se pudieron conocer los temas prioritarios, así como la fuerza moral y política que baña al Alba.
El Alba está de pie, vivito y coleando, ahora es cuando tiene que dar, aseguró.
Recordó la visita de Hugo Chávez a La Habana, diciembre de 1994 y del emotivo primer encuentro con el Comandante en Jefe Fidel Castro Ruz.
En el año 2004 se pudieron hace realidad los sueños compartidos de Cuba y Venezuela, consideró Maduro, para entonces las circunstancias eran otras y de las mentes de ambos mandatarios habían surgido proyectos como Petrocaribe y las Misiones, profundamente humanistas.
El Alba nació como una alternativa para el proceso unitario latinoamericano desde hace 14 anos.
Hoy hacíamos balance de lo que ha significado el Alba para los países de Latinoamérica y el Caribe en materia de educación, salud, energética, de inversión en infraestructura, en diplomacia… Son muchos los procesos que el Alba ha podido impulsar en el ámbito diplomático, su voz es buscada como la de la verdad, la valentía, la solidaridad mundial con las causas de los pueblos.
Son muchos los retos identificados en la Cumbre de hoy, el primero es el reto de desarrollo económico. Solo nosotros podemos integrar un pensamiento económico propio, hay que revitalizar esos esfuerzos para construir un modelo unificador que se enfrente al pensamiento neoliberal.
Como gatos panza arriba nos defendemos en todos los escenarios políticos del mundo, pero quizás la materia pendiente más importante es la del desarrollo económico para sostener el desarrollo social, la felicidad, la tranquilidad y prosperidad a que tienen derecho nuestros pueblos.
Hoy hemos asumido el compromiso de avanzar con la misma perseverancia obsesiva de las causas políticas hacia un estadio superior de integración y desarrollo económico.
Es mentira que cada quien, por su lado, logrará el desarrollo económico, tenemos que hacer una estrategia común.
Hoy podemos entender mejor la heroicidad del pueblo cubano al resistir más de seis décadas de bloqueo de Estados Unidos.
En Estados Unidos se ha desatado la locura de la guerra económica, creen que pueden arrodillarnos, comento y recordó al presidente Vladimir Putin cuando recientemente comento: No es que Rusia se quiera ir de la economía del dólar, es el dólar el que se está yendo de Rusia.
Tenemos que concentrarnos en la creación de riqueza, es el frente principal por donde se nos ataca para debilitarnos, confundir a los pueblos y a veces lo logran.
Hoy estamos viviendo una etapa dura, corrientes neofascistas han tomado posiciones de poder en América Latina y el Caribe, corrientes similares en Europa. De un ciclo progresista marcado por el surgir del Alba y los liderazgos de Lula da Silva, Néstor Kichner, el Frente Amplio en Uruguay… hemos pasado a una etapa de dura pugna por el poder.
Importantes gobiernos de Latinoamérica están hoy en manos de una derecha intolerante que casi han llevado a Mercosur a la desintegración del Mercosur y provocaron el congelamiento de Unasur. Esas corrientes amenazan militarmente a Venezuela.
Son condiciones adversas, pero hay esperanza al mirar estos 14 años de expansión donde está el Alba como referencia, dispuesta a resistir, dura, fuerte… Tambien cuando uno ve hombres que representan pueblos, como Raúl y Daniel, y recuerda a Fidel y a Chávez, uno siente que sus legados nos empujan.
Preparémonos para nuevas batallas y para, desde el Alba, renovar la esperanza, concluyó.
