Idalis Ortiz (+78 kg) es la más grande judoca de Cuba desde hace una década. Y en cada competencia lo ratifica, tal y como sucedió este fin de semana en el Grand Slam de Osaka, Japón, donde fue uno de los tres nombres que pudo romper el dominio de los anfitriones en la fortísima lid y alzarse con el título, válido para ascender al primer lugar del ranking olímpico en su división.
La titular olímpica de Londres 2012 y siete veces medallista del orbe no consumió el tiempo reglamentario frente a sus cuatro rivales, pues a todas las venció por ippón en menos de tres minutos. Primero superó a la joven nipona Maya Akiba y luego dispuso de la taipeiana Wen Tsai Jia. Ya en semifinal tomó desquite contra la local Nami Inamori (la había vencido par de veces en el 2015 y el 2016), en tanto por el título doblegó a Akira Sone, quien había eliminado a la campeona mundial de Bakú, su compañera Sarah Asahina.
“Estoy feliz porque es mi tercer oro en estos eventos (antes triunfó en los Grand Prix de Cancún y Budapest) y ya estoy primera en el ranking olímpico con mil 900 puntos. Solo me resta el Masters de Guangzhou, en China (15-16 de diciembre)”, dijo vía Facebook la artemiseña, quien ha ganado 22 de los 24 combates celebrados y es una firme candidata a la mejor deportista cubana del 2018.
«Fue una competencia muy fuerte, ya que se realiza en la casa de los creadores del judo y ellos por todos los medios buscan ganar su torneo. Además, los participantes son de gran nivel, por eso se considero que es uno de los torneos con mayor calidad de los que se realizan en nuestro deporte2, señaló Ortiz
La otra presea de nuestra selección femenina en la tierra madre del judo fue para Kaliema Antomarchi (78 kg), bronce tras ceder en el pase al oro contra la anfitriona Ruika Sato por ippón. En la repesca venció sin contratiempos a la ecuatoriana Vanessa Chala.
Muy por debajo de lo esperado quedó el submonarca mundial de los 90 kilos, Iván Silva, séptimo con derrotas ante el holandés Noel Van Tend y el local Sanshiro Murao, esta última sin salir al tatami. Por su parte, Andy Granda (+100 kg) tropezó con la misma piedra del Mundial de Bakú, el mongol Duurenbayar Ulziibayar, quien lo eliminó en el segundo pleito por ippón en regla de oro y lo sacó de los siete primeros escaños.
Cuba finalizó segunda entre las damas (1-0-1 más un séptimo lugar de Maylín del Toro en 63 kg), y cuarto general, detrás de Japón (11-8-16), Canadá (1-1-0) y Holanda (1-1-0). El judo cubano recibió siete invitaciones para Guangzhou: Idalis, Kaliema, Maylín, Iván, Andy, Asley González (90 kg) y Osniel Solís (66 kg).
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