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Establecer contratos sobre bases objetivas

Foto: René Pérez Massola
Foto: René Pérez Massola


La concertación de contratos sobre bases reales que permitan garantizar el cumplimiento de los planes de producción y otras actividades decisivas en el sector cooperativo y la atención priorizada a los espacios de debate con el campesinado estuvieron entre los temas principales debatidos durante la sesión final del VIII pleno de la Asociación Nacional de Agricultores Pequeños (Anap).

Las intervenciones de los participantes en la reunión coincidieron en que la contratación debe incluir todo y a todos y al decir del cooperativista Alcides Madrigal Álvarez, del municipio de Cabaiguán, en la provincia de Sancti Spíritus “realizarse de manera personalizada con cada productor, finca a finca a finca. Quien haga un plan, tiene que cumplirlo y no solo crecer en áreas sino también en rendimientos”, acotó.

A lo anterior, Yumeykis Cruz Domínguez, presidente de la cooperativa Amistad Cubano-Búlgaro, en Mayabeque, subrayó que para establecer una contratación objetiva hay que tener en cuenta a diversos organismos e instituciones, acercarse a los centros científicos para que diagnostiquen los suministros que requiere cada suelo en aras de mitigar las limitaciones materiales que tiene el país.

Foto: René Pérez Massola


Otro asunto relevante está en los programas de desarrollo. Es un elemento decisivo porque constituye la brújula de la prosperidad para las cooperativas, significó Fernando Ravelo, presidente de la CPA Amistad Cuba-México, en Artemisa. Para Yuleidys Menéndez, de Pinar del Río, es un elemento que debe insertarse en el contexto de cada localidad a fin de beneficiarla e involucrar a todos los factores de la comunidad.

De acuerdo con una valoración del cumplimiento de los objetivos de trabajo derivados del XI Congreso de la Anap, al cierre de octubre la venta de viandas se comportó al 95 por ciento, las hortalizas al 104%, los frutales al 115%, el frijol a casi un 132%, el arroz al 96% y maíz al 91%.

Al intervenir en el pleno Gustavo Rodríguez Rollero, ministro de la Agricultura, apuntó que el país dispone de 10 millones de hectáreas, de ellas 6 millones son agrícolas y a esa tierra hay que extraerle el máximo potencial.

Recabó que todos los años las cooperativas elaboren sus planes de economía, concatenar los macroproyectos y aplicar conocidas alternativas como el hidrato de cal y la tabaquina con el fin de suplir déficits de plaguicidas y otros productos.

Julio García, presidente del grupo empresarial  Azcuba, informó sobre la el inicio de la zafra azucarera en 10 centrales y la incorporación de los que están previstos para el 20 de diciembre.

Al resumir el pleno José Ramón Monteagudo Ruíz, miembro del Secretariado del Comité Central del Partido Comunista de Cuba, destacó que no podemos conformarnos con los avances registrados hasta hoy; tenemos que tener una sana insatisfacción con lo que hacemos y ser capaces de ver lo que nos falta por hacer y, sobre todo, identificar las causas por las cuales no logramos determinados objetivos, indicó

Consideró impostergable mejorar el funcionamiento de las estructuras de la Asociación, y prestarle una atención diferenciada a aquellas con mayores dificultades, continuar fortaleciendo las direcciones de las juntas directivas  y llegarle a todas las cooperativas,

La asamblea –pondero- es el escenario ideal para discutir los problemas, sus causas, evitar que estos se acumulen, trazar acciones y generar los compromisos que nos estamos proponiendo, hablar claro y convocar a los que no aportan todo lo que pueden aportar.

Señaló que las cooperativas deben tener una base económica fuerte para lo cual hay que producir con eficiencia, lograr un desarrollo integral, consolidar lo que se ha alcanzado y no retroceder.

Somos del criterio de que podemos lograr más con lo que tenemos si somos capaces de erradicar un grupo de deficiencias subjetivas y actuar con mayor agilidad e inmediatez en la solución de los problemas

Monteagudo Ruíz llamó a dar una batalla contra las tierras vacías, ociosas o parcialmente explotadas y utilizar mejor las áreas bajo riego, las de secano que son la inmensa mayoría, intercalar cultivos, la maquinaria y aquellas experiencias positivas.

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