Sobre los riesgos potenciales que entraña el oficio de conducir y la responsabilidad cotidiana, social y económica de los choferes, hablaron en el taller provincial de Seguridad y Salud en el Trabajo, auspiciado por la CTC en Las Tunas, a propósito de la Jornada Nacional que en torno a esta prioridad desarrolla la organización sindical en todo el país.
En el encuentro, el primer teniente del Ministerio del Interior y primer oficial de Tránsito en el territorio, informó acerca de la accidentalidad y sus principales causas y actualizó aspectos del Código de Vialidad vigente.
Dijo que hasta el mes de octubre de este año aquí han ocurrido 310 colisiones con el saldo de 23 muertos, 310 lesionados y cuantiosos daños materiales, y que aunque estos hechos en relación con similar período del 2017 experimentan una disminución de 47 y computan 74 lesionados menos, se mantiene la misma cantidad de fallecidos.
“Entre las causas predomina el factor humano”, enfatizó, y reseñó los adelantamientos indebidos, la desatención en el control del vehículo y la ingestión de bebidas alcohólicas, entre otras violaciones de la ley.
Varias intervenciones refirieron la debilidad que representa el empleo de medios de transporte que datan de las décadas de los 80 y los 90 del pasado siglo, por eso “el imperativo es ir a la vía después de comprobar que las condiciones técnicas reúnen los parámetros de seguridad establecidos”, enfatizó Leovanys Ávila Góngora, secretario general de la CTC en la provincia.
También insistieron en la importancia de cumplir los mantenimientos programados que permitan corregir a tiempo las deficiencias, pues el mal estado técnico se conjuga con las imprudencias de peatones, ciclistas, cocheros y otros usuarios de la vía y pueden alimentar este flagelo.
Odalys Batista, miembro del Secretariado Provincial de la CTC, remarcó la gran responsabilidad de quienes desempeñan esta labor en todos los sectores y la necesidad de conducir con apego a la ley.
En el encuentro fueron estimulados los choferes más destacados, atendiendo a los desvelos por el buen estado técnico de los vehículos y el respeto a las regulaciones y normativas que la conducción vial.
