En plena faena productiva, codo a codo con sus compañeros de labor sorprendimos a Erich Pérez Márquez, un joven espirituano que se desempeña como técnico productivo de la industria encargada de procesar el pescado de agua dulce de Sancti Spíritus.
En ese instante elaboraban un novedoso surtido consiste en un picadillo condimentado, que se comercializa envasado y listo para consumir. “Me gusta estar innovando cosas nuevas, buscar soluciones porque de ahí depende el salario del trabajador, la productividad de la empresa y la comida del pueblo”, comentó a esta reportera.
“La Empresa Pesquera de esta provincia es de las mayores productoras de materia prima en el país. Cuando no existe capacidad de procesamiento aquí, se vende a otros territorios. Pero nosotros buscamos convertir la mayor cantidad de materia prima en un producto terminado, para generar mayor valor agregado y que toda esa comida se consuma en nuestra geografía.
“Confeccionamos una variedad amplia de productos a partir de los peces que se capturan en presas y ríos, pero ahora pensamos en otros surtidos listos para consumir y agilizar los quehaceres hogareños, principalmente de las mujeres trabajadoras”, precisó el entrevistado.
Deseos infinitos de trabajar, gran sentido de pertenencia hacia su centro de trabajo y un sinfín de ideas inteligentes caracterizan el quehacer de este Ingeniero Industrial. Esas cualidades fueron reconocidas por su colectivo que recientemente lo eligió como delegado al XXI Congreso de la Central de Trabajadores de Cuba a celebrase en La Habana en abril de 2019.
“Mis compañeros vieron en mí la posibilidad de representarlos en este congreso y me siento muy comprometido para encontrar la oportunidad de expresar sus inconformidades o conformidades de su sistema laboral, propiciar la solución de problemáticas o hallar respuestas a insatisfacciones como el salario y cómo repercute este en el bienestar de la familia o la inconformidad con la edad de jubilación en tareas productivas de gran esfuerzo físico como la de los pescadores.
“A veces las personas con cierta edad se acostumbran a ver esas cosas de una manera y se conforman. Ahí estamos los jóvenes con ímpetu para aportar una mirada renovadora. De la juventud hay que tomar el protagonismo, el arrastre de las masas y siempre acompañarnos de las personas de mayor experiencia y beber de ese caudal de sabiduría para juntos encontrar una solución efectiva”, concluyó Pérez Márquez.
