La Central de Trabajadores de Cuba (CTC) y los sindicatos nacionales convocan a la clase trabajadora, a interlocutores sociales y del movimiento sindical de todas las latitudes, a unirse en la jornada mundial que se efectuará del 25 al 31 de octubre para condenar las crueles y genocidas políticas de los Estados Unidos contra Cuba.
En la declaración se expresa que el cerco económico y financiero estadounidense impide elevar plenamente los niveles de producción, los servicios, y lograr el desarrollo próspero y sostenible de la sociedad cubana.
La convocatoria de la CTC y los sindicatos nacionales compromete a todas las organizaciones del orbe a la lucha frente a las injusticias que hoy se comenten en el mundo.
Los trabajadores cubanos consideran que el bloqueo constituye una violación de los derechos humanos, y el principal obstáculo para el desarrollo y para crear riquezas, señala la declaración.
Ante esa disyuntiva, el pueblo cubano seguirá adelante en la búsqueda de soluciones a las dificultades, hasta convertir cada centro y puesto laboral en bastión inexpugnable en las circunstancias más adversas; y se mantendrá cumpliendo con el deber internacionalista y alzando la voz en defensa de la justicia en cualquier lugar del planeta.
Con la llegada del presidente Donald Trump, Estados Unidos retornó a la estrategia de recrudecimiento del bloqueo y acrecentó la subversión contra la Mayor de las Antillas, aspectos que demuestran la hostilidad de su política.
Durante muchos años, nuestro país ha contado con la solidaridad del movimiento sindical internacional y clasista frente a la inhumana política que ha hecho sufrir a varias generaciones de cubanos, y que ha imposibilitado a los trabajadores contar con un desarrollo económico que les permita satisfacer sus necesidades.