Un tema recurrente tratado por quienes escriben a Buzón abierto es el de la jubilación, por los ya jubilados, y por los que piensan serlo en breve tiempo.
Esto, evidentemente, preocupa a quienes peinan canas y deciden acogerse al descanso merecido y ocupa a los organismos encargados de tomar las medidas para que, según las posibilidades del país, todos puedan recibir una mensualidad decorosa.
No hay que ser especialista en demografía para ver en nuestras calles, ómnibus y establecimientos comerciales esta realidad, matizada con bastones y el lento andar de muchos de los transeúntes.
Pero lo que no se ha tratado en profundidad es la demora para recibir el pago. Recién publicamos la situación de varios jubilados de Contramaestre, que llevan seis meses en espera de la chequera. Ahora recibimos dos cartas sobre el asunto.
La primera viene de Villa Clara
Pablo Enrique Colón Pizanes, de la comunidad José René Riquelme, del municipio de Quemado de Güines, en Villa Clara, nos explica que después de laborar 50 años en la UBPC José René Riquelme, presentó su solicitud de jubilación ante la Dirección Municipal de Trabajo, el 7 de junio del presente año.
No tiene quejas sobre el trámite y está de acuerdo con el monto a recibir. Pero, y ahora es donde el asunto se le ha complicado, después de esperar tres meses, le informan en la instancia municipal que ellos “no son responsables de la demora, pues es la Ministra del MTSS la que tiene que decidir sobre todos los expedientes de jubilaciones de las UBPC del país”.
Esto, precisa, “al amparo de la Disposición Especial Primera del Decreto Ley 351/17”, para agregar que hasta el momento hay más de mil 300 casos pendientes.
Termina su carta planteando que considera “injusta que la decisión de miles de trámites de jubilación se concentre en la Ministra, sin pensar en las afectaciones” que por demora se produzcan.
Para concluir que espera “sin mucha esperanza, pues la Disposición Especial Primera del Decreto Ley mencionado, no establece término para responder”.
La segunda es de La Habana
Esta misiva nos la remite Margarita Moreno Viera, residente en Ramos 24 esq. a Cortés, reparto La Solita, Arroyo Naranjo.
Ella es maestra del grado prescolar en la escuela Manuel Saíz Sánchez, ubicada en Dolores y 15, Lawton, 10 de Octubre, y plantea que está tratando de jubilarse.
Margarita comenzó su vida laboral como educadora en círculos infantiles y desde 1996 es maestra.
Nos cuenta que “en enero cumplí 60 años y decidí retirarme, así que esperé el 1ro.de junio para presentar mi solicitud, ya que quería terminar el curso escolar.
“Un compañero me explicó que había atrasos y debía esperar dos o tres meses. Ya han pasado cinco y siguen respondiendo con la misma excusa.
“A otro compañero, con una situación similar, le orientaron ir a 25 y G, ‘donde hay una oficina del Ministerio de Trabajo y Seguridad Social’. Con él, suman 14 los trabajadores con similar problema”.
En enero precisa,
“tendré 61 años y los motivos para la demora no son entendibles, pues creo que las personas encargadas de estos asuntos deben acelerar esos trámites”.
A pesar de su disgusto, la conciencia de esta lectora le obliga a ser consecuente con su profesión, cuando nos aclara:
“Cuando hice mi solicitud dije que iba a reincorporarme al curso 2018-19, porque era responsable de la educación de losniños que había atendido en su preparación durante el programa Educa a tu hijo .
“Espero que las entidades encargadas resuelvan este problema antes de pasarme de la edad acordada”.
Lógicamente, la espera, desespera.