Aunque el sector agropecuario, forestal y tabacalero en Las Tunas exhibe buenos resultados en varios frentes, nadie cuestiona el derecho otorgado a la Empresa Agroforestal Integral de elegir un delegado directo al XXI Congreso de la CTC.
Tampoco contradicen la decisión de llevar el mérito a la unidad empresarial de base Comercial, cuya gestión económica es determinante en los éxitos de la entidad, en lo fundamental referido a la exportación de carbón vegetal y de producciones de artículos de alta demanda popular.
Finalmente, fue la brigada Carpintería Aserrío Libertad el centro seleccionado y el carpintero Ángel Núñez Tamayo el distinguido con la condición que honra a otros cinco tuneros.
Pero, Ángel no asistió a la asamblea, “ese día estaba cumpliendo con mis deberes de juez lego en el Tribunal Popular Municipal de Las Tunas y la noticia me la dio en la casa mi hermano. Toda la familia se alegró muchísimo”, recuerda.
Y a pesar de su ausencia se llevó el voto de su colectivo laboral que reconoce un currículum vítae signado por su constante bregar en faenas productivas y de activismo en el movimiento sindical con más de 12 años al frente de la sección.
Hace 34 años que comenzó su vida laboral, de los cuales ha dedicado 24 al oficio de carpintero, “he pasado por la mayoría de las áreas de la carpintería y definitivamente me quedé aquí, donde elaboramos los elementos de colmena que son comercializados con las provincias de Santiago de Cuba, Camagüey, Holguín y en Las Tunas. Y lo asumimos como un compromiso con la laboriosidad de las abejas”.
Ángel dice que por cosas de la vida solo estudió hasta el noveno grado, si bien ha hecho del trabajo y del intercambio con sus colegas una academia que enriquece su sabiduría natural, principalmente en temas relacionados con la legislación laboral vigente, “una herramienta imprescindible para el trabajo del movimiento sindical”, enfatiza. Y su locuacidad da fe de esa afirmación.
En su hoja de servicios sobresalen, además, una década al frente del Órgano de Justicia Laboral e igual período como juez lego del Tribunal Popular Provincial, y las tres oportunidades en que fue merecedor de la medalla de Vanguardia Nacional del SNTAF, entre otros reconocimientos.
No obstante, el júbilo por la buena nueva no opaca sus perspectivas: “Sabemos que nos vamos a enfrentar a un Congreso en coyuntura muy difícil, por eso debemos convertirlo en escenario para trazar nuevos estilos de trabajo y pautas acerca de cómo desarrollar nuestro sistema social y económico, y que luego lleguen a la base con el propósito de sumar a todos los colectivos”, remarca.
“Porque, reafirma, es primordial valorar cómo salvar nuestra economía, diseñar vías y fórmulas que nos permitan salir adelante, vencer las carencias que genera el bloqueo impuesto por los Estados Unidos; pues a veces en nuestras manos hay soluciones y no las implementamos, entonces el sindicato tiene la obligación de organizar, convocar, movilizar a sus afiliados en esa batalla por el socialismo próspero y sostenible que queremos edificar”.
