Por Luisa María González
La embajadora de Cuba ante la Unesco, Dulce Buergo, destacó este miércoles los valores del proyecto de Constitución de la isla, texto que combina toda la herencia de independencia y autodeterminación del país con elementos de marcada actualidad.
En entrevista con Prensa Latina, la representante diplomática enfatizó que la propuesta de carta magna contempla “todo el acervo nacional independentista. El patrimonio nacionalista y de autodeterminación, nuestras luchas históricas, se vuelcan en el documento”.
Pero al mismo tiempo, agregó, “se le incorpora un número importantísimo de elementos nuevos que actualizan la Constitución y la ponen a la luz de los avances contemporáneos”.
De acuerdo con la embajadora, en el texto que actualmente se somete a debate popular es evidente “la retroalimentación de la realidad social del país y eso le da un basamento muy sólido”.
En estos meses y hasta noviembre, la sociedad cubana está inmersa en el proceso de análisis del proyecto de reforma constitucional, dirigido a recopilar todos los criterios, sugerencias e inquietudes de la población para llegar a un documento final que refleje las aspiraciones de la ciudadanía.
“Es un momento importante para el país desde el punto de vista histórico y para uno en lo individual, porque estamos participando en la elaboración del documento que va a guiar el futuro, y que reafirma al mismo tiempo el carácter socialista de la Revolución, traza el camino de hacia dónde queremos dirigir nuestro proyecto social, económico, solidario, humano, de justicia social”, sostuvo.
Recientemente en Francia tuvo lugar el debate sobre el tema, con una amplia participación de los diplomáticos y trabajadores de las embajadas ante París y ante la Unesco, así como de representantes de empresas acreditadas en esta nación europea.
La embajadora resaltó que los participantes llevaban el documento estudiado, marcado y subrayado con las ideas de cada quien, lo que evidencia el nivel de involucramiento de los cubanos en el proceso.
“En los días previos intercambiamos entre nosotros mismos. Además, hay mucha información en los medios de comunicación, hay una preparación de la gente y eso moviliza aún más y enriquece el debate, porque en esa dinámica a veces se accede a análisis y puntos de vista de otros que quizás uno no había pensado”, comentó.
La embajadora también se refirió a la importancia de divulgar la realidad del proceso en los diferentes espacios, y en su caso particular, en una organización internacional relevante como es la Unesco.
“Tenemos que divulgarlo porque a veces hay mucho desconocimiento, en otros casos hay quienes intentan minimizar el alcance de lo que estamos haciendo, y habrá muchos que tendrán la intención de tergiversar, porque saben que estamos en el camino correcto, porque todos somos parte de un ejercicio verdaderamente democrático y participativo”, argumentó.
(Tomado de PL)