Cargando...Luego de un recorrido por doce provincias del país, la Ministra de Educación Ena Elsa Velázquez Cobiella expresó en Sancti Spíritus que se trabaja intensamente para garantizar que los más de un millón 740 mil estudiantes que deberán asistir a las aulas el próximo 3 de septiembre en toda Cuba, tengan las condiciones creadas para garantizar el éxito del curso escolar 2018-2019.
La titular hizo énfasis en el completamiento de la cobertura docente, pues existen alrededor de 10 mil necesidades de educadores en la isla, con marcada incidencia en territorios como Matanzas, La Habana, Artemisa y Sancti Spíritus.
“Aunque en algunas provincias no declaran déficit, es decir que no habrá grupos de estudiantes sin maestros, se incrementan las alternativas para suplir esas necesidades el venidero curso, y eso pone un bombillo rojo porque no es un profesor de plantilla en la escuela sino como un contrato, o un estudiante universitario quien impartirá la clase en esos casos”, declaró Velázquez Cobiella.
Insistió además en el incremento de la estimulación y la atención a los maestros, para evitar el éxodo hacia otros sectores. Reconoció que, aunque se avanza en ese aspecto, lo hecho es aún insuficiente.
La Ministra recalcó la necesidad de continuar mejorando la situación constructiva de las escuelas y dijo que la reparación de los centro debe realizarse integralmente para dejarlos en condiciones óptimas.
Reconoció que hay una situación muy favorable con la continuidad de estudios, pues este año se abrieron nuevas carreras técnicas y creció el interés hacia las de perfil pedagógico, aunque debe incentivarse la motivación hacia las asignaturas de matemática y física que no son demandadas.
Durante la visita a predios espirituanos Ena Elsa Velázquez se refirió al rol que desempeñan los educadores en la orientación y preparación de los estudiantes para que participen en los debates sobre la reforma constitucional que se efectuarán en las aulas cubanas.
Está claro que ya no tenemos una educación de excelencia, ya no es motivo de orgullo, porque donde faltan profesores no hay calidad, elemental.