Barranquilla.- Quizás en estos Juegos Centroamericanos y del Caribe no se vuelva a dar un partido tan emocionante, enardecido y caliente como el vivido en la noche del 24 de julio en el Coliseo Elias Chewing, donde la selección femenina colombiana de baloncesto rompió 48 años de historia y venció a su similar de Cuba 67-65, para agenciársela medalla de oro.
El primer cuarto del juego mostró la lógica presión de una final, con más de tres mil almas apoyando a su elenco, de ahí que el marcador 17-15 tuviera cierta lógica, no así la pobre efectividad en los tiros desde la media distancia ni los errores infantiles cometidos: atrasos de balón, faltas técnicas o el consumo de los 24 segundos sin tirar al aro.
Para el segundo tiempo, el director de las cubanas, Alberto Zabala, introdujo algunos cambios del quinteto titular y aunque siguieron el desespero y atropello a la hora de buscar las canastas se logró asegurar la mitad del partido con ventaja de siete puntos 30-23. Pero el Coliseo Chewing no dejaba de temblar con el respaldo de la afición al equipo local y la película sufriría un giro de 90 grados.
Las locales salieron como fieras en el tercer cuarto, lideradas por Maira Caicedo y María Palacios para remontar el marcador, lo cual lograron al doblarnos en anotaciones 18-9 y poner a punto los nervios de punta con un global de 41-39. Faltaba 10 minutos para el cierre y ahogar las esperanzas de las cubanas.
No obstante, como buenas monarcas defensoras, salieron a darlo todo en ese período y casi logran el triunfo si no fuera por una bola arrebatada a Arlenis Romero en los últimos segundos, que permitió a las cafetaleras igualar a 55 cartones y provocar un alargue de cinco minutos más.
Otra vez los mismos errores de todo el partido afloraron y la prórroga finalizó con el delirio de las locales, que aprovecharon cada debilidad nuestra para imponerse 12-10 y llevarse el título 67-65. De nada valió haber dominado la clasificatoria, con victoria incluida sobre Colombia por 15 puntos. A la hora del cierre, se rompió la historia.
“No supimos anotar y tiramos apresurados”, Zabala
“Sabíamos que era un difícil rival. No supimos hoy estabilizarnos ofensivamente y eso fue lo que nos costó el partido. Hicimos tiros muy apresurados y la efectividad del 33% no fue buena”, comentó el director técnico de las cubanas Alberto Zabala.
“Hoy tiramos al aro más mal que el primer día y en una final con esa baja efectividad no se puede ganar. Defendimos muy bien ante un equipo Colombia parado sobre la cancha, pero no supimos anotar nosotros. Y eso nos costó vergonzosamente la derrota”, apuntó.
“Nuestras muchachas se merecían el oro, pero no se pudo. Analizaremos luego en video cada una de las fallas y seguiremos trabajando. El esfuerzo de ellas no faltó y un ejemplo de ello es que perdíamos por seis puntos faltando unos segundos y lo pusimos a uno”.
“Nosotros le dijimos que hoy no solo valía la disposición sino la inteligencia y eso nos faltó en la ofensiva. La principal dificultad del partido fue que no supimos tácticamente anotar y tiramos muy apresurados. El público hizo su papel muy bien y fue un factor más para desesperar a las muchachas”, concluyó.