Desde el 14 de julio y hasta el 27, la ciudad santiaguera vive días de carnaval con una sucesión de este tipo de festejo popular —acuático, los pasados días 14 y 15; el infantil tuvo lugar del 16 al 20; y el de adultos del 21 al 27— que deviene realce de una tradición con más de dos siglos de historia.
El Rumbón Mayor, distinguido como Patrimonio Cultural de la Nación e inscripto en la red de carnavales del Caribe, se desarrolla en 43 áreas de esta urbe suroriental en las cuales la música, acompañada de ofertas gastronómicas, arrastra a una multitud de santiagueros, cubanos llegados de otras provincias, e incluso extranjeros, en total desborde de alegría.
En este 2018, y según precisiones de Orisel Chacón, directora provincial de Cultura, más de una veintena de orquestas se insertan en la programación concebida para diversas áreas que se convierten en termómetro del baile en Cuba, díganse Trocha, Carretera del Morro, Martí, Santa Úrsula y Sueño. Estarán JG, Wil Campa, la Original de Manzanillo, Maikel Blanco, Karachi, los septetos Santiaguero y Turquino, Pachito Alonso, Manana Club, Maravillas de Florida, Morena Son y Suena Cubano.