Una nota oficial de la Empresa de Grabaciones y Ediciones Musicales (Egrem), difundida en esta capital, da cuenta de que el célebre cantante salvadoreño Álvaro Torres suspendió su gira por varias provincias de Cuba después de su extraordinario concierto en la Plaza de la Revolución Ignacio Agramonte, de Camagüey, donde se congregaron más de 130 mil personas para disfrutar de sus canciones y de las del joven músico cubano Juan Guillermo Almeida (JG).
La causa de tal decisión es un asunto personal de último minuto que obligó al artista a viajar con urgencia hacia la ciudad de Miami, en Estados Unidos, motivo por el cual, con la gentileza que le caracteriza, ofreció disculpas por el imprevisto y las molestias que pudiera causar a quienes esperaban sus conciertos en el Anfiteatro Mariana Grajales de Santiago de Cuba (17 de julio), La Concha de Manzanillo (18 de julio), Casa Fiesta de Bayamo (19 de julio), y Pista Bariay, Holguín (20 de julio).
Marleidy Muñoz, directora de Comunicación del sello discográfico Egrem, dijo que los espectáculos de Álvaro Torres se suspendieron con mucho pesar pues el artista siente un profundo respeto y consideración por el pueblo cubano y en cuanto sea posible volverá a nuestra nación. “Conocemos cuánto es admirado Torres en nuestro país, pero era necesario que estuviera cerca de su familia en estos momentos y el público seguramente comprenderá”, enfatizó la directiva.
Álvaro Germán Ibarra Torres, nombre completo del afamado bolerista y baladista, actualmente prepara su primer disco con la mencionada empresa de grabaciones de Cuba, el cual está conformado por números correspondientes a su autoría en las voces de otras celebridades, entre ellas Omara Portuondo, Eliades Ochoa, Pancho Céspedes, Isaac Delgado, el Septeto Santiaguero, Leoni Torres, Buena Fe y el Buena Vista Social Club.
La gira recién cancelada por diferentes provincias estaba incluida en el programa de actividades previstas por la Egrem para el presente período estival.
Durante su actuación en Camagüey, el pasado 15 de julio, el cantautor nacido en el año 1954 en la localidad salvadoreña de Usulután, afirmó que actuar en la Mayor de las Antillas era un sueño muy personal que por fin se había hecho realidad. “Durante mi carrera –dijo– muchas veces me han hablado de que en Cuba se conoce y se escucha mi música. Qué lindas sus voces, cuántas luces».
La multitud congregada en la Plaza de la Revolución Ignacio Agramonte, en la ciudad cuna del Mayor General Ignacio Agramonte y Loynaz –insigne patriota de las luchas por la independencia del yugo español–, acompañó al cantante durante la interpretación de los temas que hizo allí, entre ellos Espacios vacíos y Buenos amigos.
Por su parte, el carismático joven director de la orquesta JG, Juan Guillermo Almeida, estremeció al auditorio con Dame un traguito, canción compuesta por su padre, Juan Almeida Bosque, héroe de la Revolución cubana.
El programa presentado por ambos músicos en Camagüey era similar al que llevarían a los demás territorios del ámbito nacional en los que estaba anunciada su presencia.
