Por Fabio M. Quintero, estudiante de Periodismo
El cuadro de octavos de final está desbalanceado. Por un lado, equipos que suman 14 títulos mundiales, por el otro solo en una ocasión una escuadra ha tocado la gloria. El duelo entre Inglaterra-Bélgica definía más que el liderato del grupo G. Definía el camino duro o el “cómodo” para ambas selecciones. Al parecer Bélgica no creyó en organigrama escabroso.
Gracias a un golazo de Adam Januzaj los diablos rojos derrotaron al conjunto de los tres leones y avanzaron como cabezas de llave a la siguiente. Al jugador de la Real Sociedad poco le interesaron los posibles cruces y firmó de zurda una de las mejores dianas de la Copa.
Supuestamente Inglaterra fue la más beneficiada con este resultado pues aunque enfrentará a Colombia en la próxima instancia, evitó un posible choque contra Brasil en cuartos de final. ¿Habrán elegido rival los británicos?
Con el pase en el bolsillo, ambos directores técnicos sentaron a la mayoría de los titulares. En Bélgica a excepción de Courtois y Boyata, los demás jugadores habían sido suplentes en los pleitos previos. Asimismo, en Inglaterra, el portero y un defensor fueron los únicos habituales que saltaron a la arena de Kaliningrado: Jordan Pickford y John Stones.
Los compases iniciales se tornaron lentos. Los equipos tocaban sin hacerse mucho daño. No había combatividad en el verde. Aunque Bélgica proponía un poco más.
Yuri Tilemans de fuera del área probó al portero inglés. Pickford con dificultad la envió al tiro de esquina. Ademas, Fellaini tuvo una de peligro tras el rechace de un córner; pero su disparo fue bloqueado por un defensor. La escuadra de la rosa por otra parte, poseyó en un centro desde la derecha de Jamie Vardy la única clara de la primera parte. Luego de llegar a línea final, el atacante del Leicester hizo un centro shot. Courtois con el pie rechazó la Telstar.
Sin disparos a puerta terminaron los primeros 45 minutos para los ingleses. Dos realizaron los belgas, quienes dominaban sin excederse. Parecían tener más ganas.
El complementario comenzó con un cambio para los discípulos de Southgate. Harry Maguiere sustituyó a un John Stones con molestias en las pantorrillas. Inglaterra presionaba jugaba con una intensidad mayor que lo mostrado en el primer tiempo; pero distaba mucho de todo su potencial.
En cambio, los diablos seguían más animados. Januzaj, Thorgan Hazard y Batsuayi querían anotar su gol. En el 52, el jugador de origen kosovar encontró su recompensa. Recibió el balón en el costado derecho del área, se acomodó de zurda y soltó un zapatazo al palo más lejano del meta. Primera diana con la selección del ex Manchester United.
Uno que si juega en el United, Marcus Rashford era quien más proponía por su escuadra. En el 67 tras una habilitación de Vardy quedó mano a mano con Courtois. Venció el arquero del Chelsea. Córner para Inglaterra.
Ya en el final un buen intento de Mertens (entró por Tilemans en el 77) puso a volar a Pickford. También Fellaini pudo anotar el 2-0 en el descuento. Un aspecto positivo del choque para los hombres de Bob Martínez fue la entrada en el 74 del capitán Vincent Kompany, su debut en Rusia, pues esta con problemas físicos desde el ocaso de la temporada de clubes.
Este fue el triunfo 22 de manera consecutiva para la Bélgica del director español. Al parecer le interesaba muy poco el partido a los ingleses .Veremos a quien le sale mejor la estrategia. Por lo pronto Bélgica-Japón e Inglaterra-Colombia en octavos.
