Con el principio martiano de que “saber leer es saber andar”, una jornada de presentaciones literarias, auspiciada por el Instituto Cubano del Libro (ICL), los Ministerios de Educación y Cultura, entre otras instituciones culturales, ve la luz dentro de la intensa vida cultural de nuestro país. Se trata de El Libro del Mes, iniciativa que forma parte del Programa Nacional de la Lectura.
El cuaderno de poesía Ismaelillo, de José Martí, es el título escogido para iniciar la cita, el venidero martes 26, a las 10:00 a.m. en la calle Madera del municipio de La Habana Vieja. Para la ocasión se habilitarán dos puntos wifi y se prevé la actuación de La Colmenita.
El Apóstol le escribió esta hermosa obra a su hijo, José Francisco Martí Zayas-Bazán, en 1881, cuando residía en Caracas, la cual fue publicada un año después en versión de autor no comercializada y está considerada por investigadores y estudiosos de la vida del Héroe Nacional, como la luz anunciadora de la nueva poesía en América Latina.
Al día siguiente el volumen se presentará —a la misma hora— en la biblioteca Rubén Martínez Villena, ubicada en calle Obispo No. 59 entre Oficios y Baratillo, y el jueves 28 en Biblioteca Nacional José Martí.
El texto va a estar disponible para los lectores en varios formatos: impreso, pdf, epub, y tendrá además una aplicación para teléfonos celulares, explicó Víctor Fernández González, subdirector de la editorial Cubaliteraria, en conferencia de prensa. “La idea es que cada cual lea en el formato que más guste”, comentó.
En los meses de julio y agosto se presentarán El Principito, de Antoine de Saint-Exupéry (Editorial Arte y Literatura), y Un niño llamado Fidel Alejandro, de las cubanas María Luisa García Moreno y Rafaela Valerino Romero (Editorial Verde Olivo), respectivamente.
Cierto es que el proyecto constituye una excelente idea para estimular la lectura en diversas generaciones, pero “creer que el Instituto Cubano del Libro solo puede resolver una batalla tan grande, donde hay varios actores, es simplificar en extremo el problema. Lo que se trata es que desde las escuelas, las casas y las instituciones, ayudemos a incentivar el hábito de la lectura”, explicó Juan Rodríguez Cabrera, presidente del ICL. Tarea de todos si queremos forjar un país desde el arte y la literatura.
