La incapacidad de ofrecer respuestas oportunas o, al menos, explicaciones convincentes a las principales interrogantes de los trabajadores, invalida la agenda de algunos representantes sindicales y pone en entredicho la credibilidad de la organización obrera en el país, según trascendió durante el primer debate en Sancti Spíritus, del documento Bases para el Fortalecimiento de la Misión del Movimiento Sindical Cubano.
Esa crudeza de criterios distinguió la discusión de esa pauta –que con las modificaciones recogidas en los colectivos obreros de toda la nación centrará las sesiones finales del XXI Congreso de la Central de Trabajadores de Cuba (CTC)– durante la asamblea que aglutinó a más de un centenar de trabajadores de la Universidad de Ciencias Médicas Doctor Faustino Pérez de la provincia espirituana, afiliados al Sindicato de la Salud.
Ese razonamiento partió del profesor Onel Gómez, quien motivó a la elección de verdaderos líderes sindicales, con la capacidad de ofrecer argumentos sólidos y transmitir confianza. Expuso que su reflexión deviene por no encontrar una respuesta conclusiva a la temática salarial de su sector, encargado de la formación de los profesionales de la salud pública, que a través de la colaboración internacional aportan significativamente al presupuesto estatal.
Su colega Pedro Hernández dijo que los profesores de las escuelas de Ciencias Médicas encauzan su quehacer entre las legislaciones de los ministerios de Educación Superior y de Salud Pública, y no reciben los beneficios destinados a otros profesionales subordinados a esas administraciones. Propuso que se analice, como una solución para incrementar el salario, la posibilidad de acogerse al pluriempleo dentro de rama educacional, “acción que no está permitida”, acotó.
Otro juicio escuchado en el encuentro, que sirvió de apertura a un proceso que se realizará en cerca de cuatro mil estructuras de base en toda la geografía espirituana, fue el de Yanabel Nápoles, quien equiparó el concepto de afiliación al de unidad, “porque sindicalizarnos nos hace más fuertes en la ejecución de nuestros deberes y en la defensa de nuestro derechos”, expresó.
Mercy Rodríguez Crespo, secretaria general de la CTC en el territorio, reconoció la valía del intercambio para exponer las problemáticas que fisura a la organización y extraer las posibles soluciones para fortalecerla.
Al término del debate fueron seleccionados como precandidatos a delegados a las sesiones conclusivas del XXI Congreso de la CTC, Yudelka Rivero, Onel Gómez y Ambar Brito.
