Durante la primera sesión extraordinaria de la Novena Legislatura de la Asamblea Nacional del Poder Popular, acotó en la Comisión de Salud y Deporte que el bloqueo económico político y comercial de Estados Unidos hacia Cuba ha incidido negativamente en nuestro sistema de salud pero la prioridad y la estrategia de Fidel ha permitido la continuidad de este.
Acotó que es necesario velar por la educación higiénica y epidemiológica. Sobre este asunto, ejemplificó que en existen casos de dengue en la provincia de Santiago de Cuba, donde se han implementado medidas que han llevado a análisis con los responsables, incluso, en el orden penal.
Morales Ojeda mencionó varias veces el trabajo que deben hacer el médico y la enfermera de la familia, y dijo que a estos especialistas se les hace muy difícil la atención a una población mayor de 1500 personas, y como solución a este problema, aclaró que se han construido consultorios para lograr mayor y mejor atención en la atención primaria de salud.
Exhortó a que la población acuda al médico siempre que tenga una diarrea. Antes, muchas personas achacaban este padecer a problemas de contaminación de las aguas o a procesos digestivos, pero hoy hay que velar cualquier enfermedad transmisible como el cólera.
El ministro cubano de Salud Pública enfatizó que se ha reducido el cuadro básico de medicamentos a 761 porque no se soluciona el problema teniendo más y no poder contar con ellos en la red de farmacias del país.
Explicó que esta cantidad de medicamentos da solución a la población y a la industria, y dijo que cada médico debe conocer las medicinas que hay en sus farmacias para saber qué puede recetarle al paciente.
Precisó que se trabaja mucho en la Medicina Natural y Tradicional, y que el plan de producción y presencia en las farmacias se ha cumplido pero que todavía no es suficiente.
Manifestó que hay problemas en los servicios de ambulancias, en cuanto a la respuesta e inmediatez, y para arreglar tal situación se hacen controles continuos en horarios sin precisar.
Mencionó que entre las prioridades del sector de la salud para este año están avanzar en el rescate de los conceptos fundacionales del programa del médico y la enfermera de la familia, así como en la calidad de los servicios en los policlínicos, con el objetivo de satisfacer entre el 70 y 80% de las necesidades de salud de la población en la atención primaria.
Y además, fortalecer la higiene, la epidemiología y la microbiología para garantizar la disminución del índice de infestación por el mosquito Aedes Aegypti, y así, la transmisión de arbovirosis.