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La Federación Sindical Mundial (FSM), en nombre de sus más de 92 millones de afiliados en todo el mundo, ha emitido un saludo para todos los trabajadores que “viven, trabajan y luchan en cada rincón del mundo” a propósito del Primero de Mayo, fecha que “fue, es y será una guía para la lucha”.
El texto publicado en la página web de la organización expresa que la conmemoración es “un mensaje de resistencia contra la burguesía, los imperialistas y sus políticas de alianzas internacionales”. Agrega que “la sangre de los obreros que se derramó en Chicago en 1886 nos recuerda que (…) cada derecho o libertad que fue conquistada por nuestra clase ha sido ganada a través de sacrificios, enfrentamientos y luchas organizadas”.
“Hoy, si bien la tecnología y el progreso científico han contribuido al aumento de la riqueza social producida, las condiciones de vida de nuestra clase se están deteriorando, dice. En todos los países capitalistas, los patrones atacan nuestros logros clasistas: están arrasando los salarios, las pensiones y la seguridad social; están privatizando todo, ¡no dudan en atacar incluso el derecho sagrado a la huelga! ¡La huelga es el arma más poderosa que tenemos en nuestras manos y no vamos a permitir que nadie la limite o convierta en letra muerta!
“Al mismo tiempo, están preparando y llevando a cabo intensas guerras regionales. Allanan el camino para nuevas masacres que maximizarán sus ganancias, para nuevas intervenciones imperialistas que destruirán naciones, derramarán la sangre de la gente y los despojarán de sus recursos naturales. La actual intervención imperialista en Libia y Siria, la creciente injerencia contra Venezuela, la decisión de Estados Unidos de reconocer a Jerusalén como la capital de Israel, la masacre contra Yemen, la tensión en la península coreana, todos son indicios de que las multinacionales han ‘olido’ nuevas áreas de rentabilidad, y esto pasa a través de los cadáveres de los trabajadores”.
El llamado reconoce que las armas más poderosas del proletariado son el “internacionalismo y la solidaridad”, por lo cual “ningún trabajador debe sentirse solo. Juntos, debemos avanzar (…), construyendo la unidad de la clase obrera”
El documento reafirma además la solidaridad de la FSM con el “heroico pueblo palestino para que obtenga su propia patria independiente y democrática” y con los “hermanos perseguidos, los inmigrantes y refugiados, que debido a las balas de los imperialistas o por la pobreza y la miseria generada por este sistema, se ven obligados a abandonar su patria”. Indica que “los inmigrantes deben convertirse en una parte integral de los sindicatos, unirse con los trabajadores locales y luchar juntos por los salarios, los derechos, contra las guerras y las intervenciones”.
Recuerda que “durante el reciente Congreso Mundial de Mujeres Trabajadoras en Panamá, las mujeres afiliadas a la FSM declararon alto y claro que quieren igualdad de derechos en el trabajo, la sociedad y la vida. La FSM lucha y continuará luchando también por esta igualdad. Es la misma orientación que seguimos para los jóvenes, ya que la nueva generación de trabajadores tiene la tarea de honrar a las mejores tradiciones de lucha del Primero de Mayo”.
“Este año, la FSM (…) ha anunciado el año de educación y capacitación sindical (…) y pedimos a cada sindicato que contribuya a la verdad militante, revelando el verdadero significado del Primero de Mayo y los sacrificios que la clase trabajadora hizo por él (…).
La organización “avanza, se fortalece y crece: y eso es lo que da miedo a nuestros oponentes”, por lo que “debe ser una “trinchera de lucha por un futuro sin explotación del hombre por el hombre”.
