El movimiento deportivo cubano es reconocido a nivel internacional sobre todo por sus resultados en el alto rendimiento, los cuales se basan de forma fundamental en la masividad, con el apoyo gubernamental a nuestros practicantes sistemáticos y atletas en general.
Uno de los pilares que muchas veces pasa desapercibido es la gran cantidad de árbitros y jueces de nivel mundial que hoy poseemos y nos representan en eventos de renombre. Sin toda la parafernalia mediática habitual presente en los deportistas, estos héroes están en constante jaque por parte de la opinión pública.
Como reconocimiento a ellos, figuras imprescindibles en cualquier competencia, les proponemos un acercamiento a su labor en algunas disciplinas.
La Confederación Panamericana de Bádminton designó recientemente a Luis Enrique Charadán Jefe del Comité de Jueces y Árbitros de esa organización. Entre raquetas y volantes también hacen cumplir el reglamento los antillanos Miguel Ángel León y Ever William, ambos árbitros panamericanos.
En el caso del ajedrez contamos con 17 árbitros internacionales, no muy lejos de potencias como Inglaterra (20) e Israel (22) y con más que Bielorrusia (10), todos por delante de Cuba en el ranking planetario.
Por otra parte, cinco árbitros internacionales de casa pitan durante 90 minutos y validan goles: tres hombres y dos mujeres. En el 2018 se aprobaron nuestros dos primeros referees en el fútbol playa.
Guillermo Orestes Molina tuvo el privilegio de ser el segundo al mando (Delegado Árbitro) en el evento de lucha de los Juegos Olímpicos Río de Janeiro 2016.
No podemos dejar de mencionar que hemos sido sede de cursos para los encargados de impartir justicia en varios deportes, un reconocimiento de las federaciones internacionales a Cuba. Por ejemplo, en junio próximo se impartirá uno de la Asociación Internacional de Boxeo.