Un alto contenido de obstáculos tiene el programa de producción de caña en campos aledaños al central Ciro Redondo, según la magnitud del tema más debatido en la Conferencia XXI Congreso de la CTC en el municipio de igual nombre que la centenaria fábrica de azúcar, situado en el centro de la provincia de Ciego de Ávila.
Alfredo Oropesa, de la unidad productora Ilusión, ejemplificó:
“El estímulo en CUC ya no motiva. ¿Qué culpa tienen los trabajadores de que no hayan entrado a nuestro centro todos los sistemas de riego y el atraso en esas inversiones conlleve a afectaciones salariales?
“Otro tanto ocurre con la llamada divisa líquida formada por el colectivo de la UBPC, de la cual muchas veces no podemos hacer uso con vistas a la compra de insumos por sus engorrosos trámites. Por otro lado, mientras el precio de la caña subió 1,5 veces, el de los productos para el desarrollo de las plantaciones se multiplicó por 5 y más en la entidad comercializadora Azumat”.
“No todo el mundo le mete el pecho al cañaveral y menos con tantas trabas”, sentenció Ober Luis Cantillo, dirigente sindical de base, quien subrayó: “Recientemente se aprobó una ley, por cierto, no discutida con los trabajadores, que si se aplica, puede ser el fin de la producción cañera, pues aún no ha hecho efectos, pero ya algunos de nuestros obreros están preparándose para irse a otros sectores”.
Según se conoció en la plenaria el Decreto Ley Nro. 351/2017, publicado en la Gaceta Oficial de la República de Cuba, expresa en el artículo número 40 que la cuantía de la pensión ordinaria por edad se fija en el 60 % del promedio establecido en el artículo 14, el cual refiere que “la cuantía de las pensiones se determina sobre el promedio de la base de contribución mensual de los últimos 15 años (…)”.
Cuando comienza a preocuparles a los cooperativistas cuestiones relacionadas con la jubilación, la gramínea escasea por el impacto de eventos meteorológicos y problemas subjetivos. Mérido Garri, de la industria azucarera local, dijo que el mayor tiempo perdido por interrupciones operativas en el ingenio es debido a no tener suficiente caña.
Federico Pérez Quiala, secretario general del Buró Sindical Azucarero en Ciro Redondo, argumentó: “La Ley 105 refiere que los trabajadores cubanos tenemos derecho a jubilarnos con el 90% del salario de acuerdo con el promedio de los últimos cinco años de labor, en cambio la 351 estipula el 60 % para quienes trabajan en las Unidades Básicas de Producción Cooperativa y nos toca a los sindicalistas alertar sobre este particular”.