Lograr que los productores líderes se conviertan en difusores de sus experiencias, las inculquen en quienes están más cercanos a ellos, y se les reconozca su labor como extensionistas fue la razón para el encuentro entre un centenar de hombres y mujeres de campo, que tiene como premisa el estímulo al aumento de los rendimientos y por ende, de las cosechas de alimentos del agro.
Telce Abdel González Morera, director del Instituto de Investigaciones de Granos, que junto a la Agencia para la Cooperación de Japón (Jica), llevan adelante el Programa para el mejoramiento del sistema de extensionismo agrario en la producción de granos, resaltó la trascendencia de este proyecto, “donde trabajamos juntos, y cuando se presenta un problema, unidos le buscamos soluciones”.
Quienes más saben son ustedes, dijo refiriéndose a los productores-extensionistas, que están todos los días en la tierra. Es evidente que son líderes en sus producciones, lo importante es que todos seamos parte activa de un programa que necesariamente nos llevará a la obtención de mejores cosechas.
En el encuentro e pusieron de manifiesto los resultados de productores que logran entre 7 y 10 toneladas de arroz por hectárea, o tres de frijoles, una aspiración que debe promoverse con las buenas prácticas para que esos rendimientos sean masivos y no excepcionales.
“Para este proyecto se requieren buenos productores que tengan comunicación con los que están a su alrededor. Una entidad de la investigación no tiene respuesta inmediata para un problema, sobre todo porque el escenario de la agricultura cubana ha cambiado en los últimos años y la mayor cantidad de cosecheros están en el sector cooperativo y campesino, al cual pueden llegar más rápidamente los que están más cerca, incluyendo las estaciones territoriales”, afirmó Telce.
Dijo que Cuba tiene más de 18 mil personas que se dedican a cultivar arroz, y otros 50 mil lo hacen en diversidad de otros granos, como el frijol, maíz, garbanzos, sorgo, etc, y a esa totalidad es imposible llegarle desde el instituto.
Las provincias donde mayor intercambio se desarrolla entre los productores son Cienfuegos, Matanzas y Camagüey; y Sancti Spíritus es la que mejor tiene organizado el trabajo de extensionismo, por lo que acogerá un programa piloto que será evaluado y difundido al resto de los territorios.
En el encuentro, se firmaron convenios de trabajo entre productores-extensionistas y el Instituto de Investigaciones de Granos, y se les entregó un carné que los acredita como tal. Reuniones de este tipo se efectuarán periódicamente, y existe el propósito de que cada provincia tenga por lo menos cien personas con esa categoría.
Idael Pérez Brito, viceministro de la Agricultura, cuestionó que en mucho lugares están haciendo lo mismo que hacían los abuelos, con un clima cambiante; la única manera de coger más es cambiando, por eso aseveró que este programa tiene un carácter estratégico, por lo que se debe hacer algo semejante con las producciones de viandas, hortalizas, los frutales y la forestal.
El vicetitular de agricultura refirió algunos datos sobre la producción de arroz, comparando desde el año 2012 hasta la actualidad, donde se demuestra que el uso de semillas de calidad y la aplicación de tecnología más novedosas sostienen el crecimiento de los rendimientos.
El incremento de la producción nacional de arroz y otros granos como el frijol y el maíz, están incluidos en la agenda de desarrollo del gobierno cubano, de modo que se logre la sustitución de importaciones y una elevada autosuficiencia alimentaria.
El encuentro se realizó en el hotel Bello Caribe, en La Habana, y fue el inicio del trabajo de capacitación de estos productores que se desarrollará durante esta semana en el Instituto de Investigaciones de Granos.
