El joven saltador Juan Miguel Echevarría hizo recordar a muchos los años de gloria de Iván Pedroso, al coronarse en la segunda jornada del XVII campeonato mundial de atletismo bajo techo, que se celebra en Birmingham, en la cual Cuba sacó también un bronce brillante de Yorgelis Rodríguez en el pentatlón.
Echevarría abrió delante la competencia (8.19) y le plantó duelo al subtitular olímpico y campeón del orbe al aire libre, el sudafricano Luvo Manyonga, quien reaccionó en el tercer brinco con 8.33 tras haber saltado antes 8.28 el antillano.
Como todo buen rival, el titular panamericano en la categoría sub 20, no quiso hacer menos y en el cuarto intento clavó sus pinchos a los 8.36 metros, a lo que respondió Manyonga con 8.44. Sin embargo, lo mejor quedó reservado para el final, cuando el cubano se creció y llegó hasta 8.46, la mejor marca del mundo en este 2018, imposible de vencer por el sudafricano con par de fouls.
Sin todavía cumplir 20 años —lo hará el 11 de agosto—, la nueva sensación del salto largo en el planeta (este año tenía 8.34 al aire libre) recordó a muchos la era dorada del Saltamontes Pedroso, quien archivó cinco oros en lides universales a pista cubierta (1993, 1995, 1997, 1999 y 2001). Desde entonces, no se alcanza ni siquiera un podio en esta especialidad, en tanto representó para Cuba su oro número 17 en estas lides y la presea 50.
Minutos antes, otra joven en ascenso, Yorgelis Rodríguez, campeona mundial de cadetes en Barcelona 2012, aportó el primer podio antillano en la pista inglesa, al terminar con bronce en la más agotadora de las especialidades del certamen con 6332 puntos, solo inferior a la local Katarina Johnson-Thompson (4750) y la austríaca Ivona Dadic (4700).
Aunque no es habitual verla en este tipo de competencias bajo techo y tras su discreta participación la víspera en el salto alto (terminó decimotercera), la también monarca de los Juegos Panamericanos de Toronto 2015 rebajó en cuatro de las cinco pruebas sus marcas anteriores: 60 con vallas (8,57 segundos), salto de altura (1,88 metros), bala (14,15 metros) y 800 m (2:17:70).
Como dato adicional es la primera vez que Cuba alcanza un podio en eventos múltiples en lides mundiales bajo techo y son diez las modalidades en que al menos ha vivido esa felicidad.
La última representante de nuestra delegación este viernes fue la balista Yaniuvis López, quien terminó séptima en la impulsión de la bala con su mejor marca del año (18.19) y quedó distante de los 19.62 de la titular Anita Marton, de Hungría.
Para la tercera fecha de la justa, la pertiguista Yarisley Silva y los triplistas Cristian Nápoles y Andy Díaz son las cartas de triunfo para Cuba, que marcha segunda en la tabla de medallas (1-0-1) y cuarta por puntos con 16 unidades.
