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Roberto M. López de Vivigo
Los cubanos extrañan a Leinier Domínguez. Tener a un representante en algunos de los mejores torneos del orbe era habitual cada temporada. Con su año sabático, los aficionados del juego ciencia en la Isla aprecian las partidas de la élite de los trebejos pensando siempre que uno de los suyos podría estar allí.
No obstante, 2017 nos dejó añorando al Ídolo de Güines, pero nos permite ver en acción como regalo navideño a Lisandra Ordaz, la ajedrecista antillana más destacada en la larga y fructífera historia de este deporte en la Mayor de las Antillas. La pinareña se convirtió en la primera cubana en alcanzar el título de Maestra Internacional sin distinción de sexo y superar los 2 400 Elo.
Por estos días es noticia su actuación en el Campeonato Mundial de ajedrez de rápidas y Blitz, en el Centro de Convenciones Apex, Arabia Saudita. Si bien no le ha ido bien en la lid, el solo participar es un mérito, pues Cuba nunca había tenido una representante en ese tradicional evento.
A falta de un encuentro de los 15 pactados, Ordaz acumula tres victorias, cinco tablas y seis derrotas, para 5½ unidades de 14 posibles, lo cual parece ser insuficiente para sobrepasar el puesto 63, con el que aparecía en la preclasificación.
La china Wenjun Ju lidera en estos momentos la competencia y es la única que ha arribado a 10 puntos, seguida de cerca por la turca Ekaterina Atalik y Tingjie Lei, también del gigante asiático, con 9 ½.
Carlsen, por recuperar corona
Si el año pasado el ucraniano Vassily Ivanchuk arrebató la posibilidad de la triple corona al noruego Magnus Carlsen, en 2017 las cosas son distintas y el nórdico está en la cima con 9 ½ tantos con solo una partida que disputar y en sus manos está mantenerse en la cúspide.
Chuky no participa en esta edición y con posibilidades de luchar por el título además de la Máquina de Ajedrez aparecen siete rivales que poseen nueve unidades.
Acerca del autor
Estudiante de Periodismo.
