El poeta turco Nazim Hikmet en época muy lejana, escribió pensando quizás en la posteridad: “Ama la nube, la máquina y el libro/ pero ante todo, ama al hombre”.
Quizás un pensamiento un tanto parecido animó a quienes decidieron la creación de las empresas y unidades empresariales de base (UEB) de atención a los trabajadores del Ministerio de la Construcción (MICONS), dedicadas fundamentalmente, a brindar alojamiento, alimentación y otros servicios a los que laboran en tan importante sector de la economía.
Una de las cuatro existentes en el país, la correspondiente a la provincia de Cienfuegos, subordinada al Grupo Superior de Dirección Empresarial de Construcción y Montaje, se caracteriza por los favorables resultados integrales de su gestión y de los indicadores principales, tanto de la economía, como de la emulación socialista. Ese comportamiento posibilitó que el colectivo haya merecido la condición de Vanguardia Nacional del Sindicato Nacional de Trabajadores de la Construcción (SNTC) por cuatro años consecutivos y la medalla Jesús Menéndez.
Cuenta además con la certificación del Sistema Integrado de Gestión, basado en las normas ISO 9001 y NC 136, el Reconocimiento Ambiental Territorial (2016) y el Premio de la Provincia de Cienfuegos a la Calidad, también en ese año. En la reciente celebración del Día del Constructor (5 de diciembre) recibió un certificado de reconocimiento por los resultados de la labor realizada en el presente 2017.
A los servicios de alimentación, alojamiento y recreación, se suman también los gastronómicos a los denominados terceros, o sea, a otras entidades, y la atención a eventos del propio sector. Para garantizar las producciones requeridas disponen de un centro de elaboración que utiliza como materia prima esencial la harina de trigo (panadería y repostería) y otro de embutidos, conformados y masas cárnicas, así como con una UEB pecuaria.
Uno de los principios que defiende y asegura la dirección de la entidad cienfueguera es la eficaz gestión del capital humano, con el empleo de una buena comunicación, en la que el actor principal y activo más valioso es el trabajador. El proceso de capacitación, al cual le confieren la mayor importancia, incluye la preparación inicial al incorporarse a la empresa; los encuentros periódicos sobre la introducción de nuevas tecnologías o los que estime el jefe inmediato, de acuerdo con la observación del desempeño de cada cual.
Otro propósito que figura prioritariamente en el quehacer de ese colectivo es la calidad de los servicios. Encuestas realizadas demuestran que el 98,5 % de los clientes se ha sentido satisfecho con la atención recibida.
Una UEB en Cienfuegos y otras dos en la capital del país garantizan alojamiento, alimentación y recreación. En La Habana, una de ellas está ubicada al final de la Vía Blanca, en el municipio de Guanabacoa.
Allí son atendidos constructores de los territorios cienfueguero y granmense, quienes laboran en la edificación de viviendas y en la Zona Especial de Desarrollo Mariel (ZED). La otra se localiza en el Guatao, perteneciente al municipio de La Lisa, donde se alojan trabajadores que ejecutan obras en la ZED. En estos momentos emprenden un proceso de remodelación y ampliación que alistará cuatro módulos de dos plantas para aumentar el número de albergados.
Los indicadores económicos muestran un comportamiento favorable y ascendente, con crecimientos sostenidos cada año, principalmente en las ventas. La productividad y el salario medio muestran una correlación positiva. También sobresale el ahorro de portadores energéticos, debido a la aplicación de medidas adoptadas para favorecer un uso eficiente.
El licenciado Roque Soriano Echevarría, director general de la ESTC, quien asistió como delegado a la Primera Conferencia Nacional del SNTC, efectuada a mediados del mes pasado, consideró que los resultados positivos responden a “un buen desempeño integral, a partir de un enfoque motivacional en el personal y del establecimiento de un clima de confianza con los trabajadores y entre ellos, junto con los objetivos permanentes de satisfacer las necesidades económicas y espirituales y priorizar siempre la materialización de las expectativas de los clientes.
“El crecimiento económico no es un objetivo final, sino que funciona como motor impulsor de lo propuesto”, afirmó, y explicó que el reordenamiento empresarial en el sector y la actualización del modelo económico han precisado realizar cambios en la empresa con el objetivo fundamental de alcanzar un mejor accionar administrativo, social y técnico, pero sin dejar trabajadores disponibles.
No obstante, todo lo posible no está logrado; aún pueden elevar la eficacia. “Tenemos las perspectivas de perfeccionar y desarrollar todavía más la gestión empresarial y simultáneamente, la informática y la comunicación, aplicando los avances de la ciencia y la técnica en cada uno de nuestros servicios y producciones”, expresó.
Otra característica esencial en la entidad cienfueguera es el funcionamiento adecuado del sindicato en todas sus unidades, lo que constituye una fortaleza para garantizar la participación directa de los trabajadores en la gestión. En ese empeño son básicas las asambleas de afiliados que se realizan mensualmente.
Esta empresa es un ejemplo de lo que puede lograr una empresa estatal socialista cuyo colectivo se siente altamente comprometido y asume con voluntad y empeño el desarrollo y el perfeccionamiento de manera permanente. En esta la atención a los trabajadores, externos e internos, ocupa el lugar preferente que merece.