La Revolución y el pueblo cubanos esperan mucho de los constructores; en sus manos está impulsar las numerosas edificaciones que hoy se levantan en el país. Pero lo importante, y eso quedó ratificado durante la Primera Conferencia Nacional del Sindicato de Trabajadores de la Construcción, es hacerlo con eficiencia y calidad, tal como se expresó en la reunión que acabó de concluir.
Ahora los dirigentes sindicales de este sector estratégico marcharán a sus respectivos colectivos para concretar en el seno de sus organizaciones lo ahí acordado.
Solo con una cultura de calidad muy arraigada, consciente y permanente, los hombres y mujeres de los cascos blancos marchan hacia el futuro por un socialismo próspero y sostenible.
Fueron días de debate, de análisis profundo de las insuficiencias que aún afectan al sector y sobre todo, del compromiso de seguir el ejemplo del constructor mayor de Cuba, el querido Comandante en Jefe Fidel Castro, y de marchar unidos junto al Partido y la Revolución.