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Al análisis del pensamiento y la obra de Fidel Castro y a la vigencia del ideario de Ernesto Che Guevara estarán dedicadas dos mesas de trabajo y una veintena de ponencias en la jornada de este jueves del II Simposio Internacional La Revolución cubana Génesis y desarrollo que sesiona en el Palacio de Convenciones de La Habana.
Otro asunto que ocupará la atención de los estudiosos cubanos y extranjeros que participan en el encuentro será la Confrontación Estados Unidos Cuba y el restablecimiento de las relaciones diplomáticas, dentro de la cual se abordará un recuento histórico que incluirá la evolución de las relaciones entre ambos países de Obama a Trump y se profundizará en el particular del ciberespacio como escenario del conflicto entre las dos naciones en el período 2014 al 2016.
También la atención de los expertos se centrará en la integración latinoamericana y caribeña, la obra social, económica y cultural de la Revolución cubana, el sistema político y económico cubano y su perfeccionamiento; historia, patrimonio y ciencia ; y las relaciones internacionales.
La víspera, en la comisión relacionada con las raíces históricas de la Revolución la Máster en Ciencias Yusmila Zamora Silva abordó la historia y su valor didáctico desde el pensamiento martiano y resaltó que en el periódico Patria el Maestro resaltó la importancia de la historia para formar la conciencia política lo que permitiría llevar adelante la independencia patria. En su empeño de crear un compromiso ético con el pasado de luchas, enalteció las personalidades fundadoras de la primera contienda liberadora y los méritos de las figuras vivas de la independencia.
Resaltó la especialista el interés martiano de subrayar la importancia de los hechos y sus causas para no repetir los errores y la función educativa de la historia con el fin de desarrollar conocimientos, sentimientos y actitudes.
El doctor Eugenio Suárez, director de la Oficina de Asuntos Históricos del Consejo de Estado, trató sobre las tradiciones patrias y su papel en la educación y recordó la afirmación de que el pueblo que no conoce su historia no comprende su presente y por tanto no lo domina, por lo cual otros lo hacen por él.
Se refirió a la idea de Lenin de que las tradiciones son una fuerza reguladora de las relaciones entre las personas y puso ejemplos de tradiciones cubanas. Aseguró que la ideología política enriquece las tradiciones y estas crean las condiciones más favorables `para la comprensión de la ideología.
Dijo finalmente que si no somos capaces de trasmitir esas tradiciones revolucionarias, ellas desaparecen y pueden ser tergiversadas y sustituidas por el enemigo por otras acordes a sus intereses, como cuando el propio Fidel denunció las mentiras de la historia que se enseñaban en la escuela durante la neocolonia, como la afirmación de que la independencia de Cuba la habían propiciado los Estados Unidos.
Acerca del autor
Graduada de Periodismo. Subdirector Editorial del Periódico Trabajadores desde el …
