Ana Margarita González y Evelio Tellería Alfaro
Un llamado a ejercer el liderazgo movilizador que tiene el movimiento obrero para enfrentar las labores de recuperación de las capacidades productivas y de servicios en aquellas zonas dañadas por el huracán Irma, hizo Ulises Guilarte de Nacimiento, secretario general de la Central de Trabajadores de Cuba durante un encuentro con la prensa.
El miembro del Buró Político explicó que después de decretada la fase recuperativa y del llamamiento del General de Ejército Raúl Castro Ruz, Presidente de los Consejos de Estado y de Ministros, a la CTC, los sindicatos y los trabajadores corresponden misiones estratégicas para devolver los niveles productivos y de servicios en el plazo más breve.
Precisó que el esfuerzo de los colectivos debe trascender en el lugar donde estén enclavados, pues no se trata solo de restañar los daños a su instalación sino de interactuar con los demás centros y organismos del área para llevar ese accionar hasta las comunidades.
Ulises Guilarte manifestó que las instalaciones que no tuvieron daños tienen una importante responsabilidad con la recuperación, pues sus niveles productivos deben aumentar para paliar el déficit que provoca la inactividad de otros similares o porque son trascendentales en la reconstrucción de locales, y mencionó entre esos a los productores de elementos de techos (incluyendo tejas) y los de materiales de la construcción.
Esas entidades deben potenciar sus capacidades de diseño productivo, alertó, e instó a los sindicatos a buscar resortes, movimientos que estimulen a los hombres, incluyendo discutir con los trabajadores si fuera posible y preciso crear doble turnos en algunas de ellas para multiplicar la cantidad de elementos producidos.
Comentó que otra de las tareas estratégicas es la producción de alimentos, garantizar la elaboración de galletas y panes y buscar variantes que sumen opciones para los cubanos en las regiones afectadas por el huracán.
A la recuperación de la agricultura dio importancia trascendental, porque el país se encuentra inmerso en los preparativos de la campaña de invierno de los cultivos varios, en la que se produce el 70 % de las cosechas del año, por lo que hay que dedicar especial atención a la resiembra, la recuperación y el drenaje de los sembrados y al aprovechamiento de todos los productos que están aptos para el consumo humano o animal.
Informó que el impacto de Irma sobre los polos productivos de Las Tunas, Camagüey, Ciego de Ávila, Sancti Spíritus, Villa Clara, Matanzas y La Habana fue desastroso, por lo que se deben crear movilizaciones para respaldar a los agricultores siempre y cuando estén creadas las condiciones para laborar.
Igualmente son necesarios los trabajos voluntarios para la recuperación cañera, ya que hasta el momento se cuantifican daños en techos y en la infraestructura de más de 23 centrales azucareros y de miles de hectáreas sembradas de caña que están inundadas o fueron arrasadas, pero esos retoños con atenciones culturales satisfactorias pueden rendir en el momento que van a la industria.
Igualmente instó a movilizar a los trabajadores para apoyar el saneamiento de las ciudades, fundamentalmente en la capital y borrar la imagen devastadora que dejó Irma, así como para laborar en el desbroce de las trochas por donde deben transitar los vehículos para la recuperación de los sistemas eléctricos y telefónicos.
Informó que los cuadros de la CTC y los sindicatos en todas las provincias acompañarán los programas de recuperación, esencialmente en aquellos centros fundamentales de la producción y los servicios, y a los movilizados de otros territorios que apoyan las zonas más impactadas por el fenómeno meteorológico, entre ellos los linieros, eléctricos y constructores.
El secretario general de la CTC indicó que “hay que atender a los trabajadores”, llevar la solidaridad a aquellos que sufrieron daños en sus viviendas, para lo cual se han legislado orientaciones para el tratamiento laboral y salarial que debe dárseles. También orientó que se creen condiciones para apoyarlos, desde su colectivo y sección sindical, en la recuperación de sus inmuebles.
Definió que “la recuperación de la economía es una alta responsabilidad del movimiento sindical, porque solo de la producción salen las riquezas que darán prosperidad”, por lo que insistió en “la necesidad de levantar el espíritu y la motivación de los trabajadores en cada tarea asignada”.
