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Sugieren aplicar Guía familiar (urbana y rural) para protección ante ciclones (PDF)

El Estado Mayor Nacional de la Defensa Civil de Cuba (EMNDC) recomendó la aplicación de su Guía familiar para la protección ante ciclones tropicales, tanto en áreas urbanas como rurales.

Ambos manuales constituyen una nueva iniciativa de la institución a fin de enfrentar ahora el huracán Irma, con categoría máxima de cinco en la escala Saffir-Simpson, que debe impactar directa o indirectamente a la región oriental de Cuba en las próximas 48 a 72 horas.

En el caso de las ciudades, sugieren que sus residentes contribuyan  con las autoridades y grupos designados en la evaluación de daños y necesidades, e incrementar las acciones de autofocal y eliminación de los posibles reservorios de mosquitos.

Además, revisar las instalaciones antes de activar las redes de agua, electricidad y gas, realizar limpieza general y mantener la higiene personal y colectiva de la familia, así como observar las medidas de seguridad para preservar la vida, y no transitar por lugares inundados.

Advierten que no debe acudirse a los embalses, ríos y lagunas para pescar o bañarse, ni tocar cables eléctricos, alejarse de lugares con peligro de derrumbes o deslizamientos y no regresar a la vivienda en que reside la familia, si está con peligro de derrumbe.

Deben incrementarse las medidas higiénicas y sanitarias, el lavado de los vegetales, las frutas y los alimentos que se consumen crudos, no defecar al aire libre, ni cerca de los ríos, arroyos y lagunas.

Igualmente los manuales para la protección ante ciclones orientan mantener bien tapados los recipientes con basura y alejados de los alimentos; asegurar agua para el consumo, hervida y clorada; eliminar los alimentos contaminados, y coordinar con los servicios veterinarios el control zootécnico de mascotas y los animales de crianza.

Incluso, cooperar con las comisiones designadas por las autoridades locales durante las visitas a los damnificados para la evaluación de daños, pérdidas y necesidades.

En cuanto a la población rural, si hay afectaciones estructurales en las viviendas no se debe entrar y sí solicitar la ayuda de los especialistas para diagnosticar su estado constructivo.

También resulta necesaria inspeccionar el estado técnico de los corrales y cuartones de los animales, incrementar las medidas higiénicas y sanitarias, así como eliminar los alimentos contaminados.

La familia debe concebir medidas para la protección de sus integrantes, sus bienes (que incluye a mascotas, animales de crianza) y la economía propia ante el peligro de los ciclones tropicales.

En ese sentido, los principales aspectos que deben  tenerse en cuenta son el conocimiento del lugar del centro de evacuación, instalación estatal o inmueble donde se tiene prevista su protección y el plazo para su presentación al local establecido.

Ortos hechos de interés están relacionados con evitar desplazamientos durante la noche y bajo la influencia de los vientos, las lluvias o inundaciones, así como desconectar todo lo que pueda ocasionar accidentes en la vivienda.

Es necesario buscar vías alternativas de traslado en caso de obstrucción de la ruta planificada y la preparación de un bolso o mochila para situaciones de desastres, con medios y recursos indispensables, para las familias que deben protegerse en otras viviendas, centros de evacuación, instalaciones, cuevas u obras protectoras.

También es imprescindible garantizar a personas discapacitadas, de la tercera edad, niños y embarazadas los medios que faciliten su movimiento, permanencia y las necesidades básicas durante su protección en lugares seguros.

Descargue aquí PDF  de la Guía familiar para la protección ante ciclones tropicales

Tomado de ACN

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