Ante el peligro potencial que significa el avance por el Caribe del potente huracán Irma, santiagueras y santiagueros adoptan diversas medidas encaminadas a reducir los riesgos que puede entrañar su paso por la región oriental de la Mayor de las Antillas.
Desde que fuera decretada la fase informativa, y con el liderazgo del Consejo de Defensa Provincial, comenzaron a implementarse las medidas contenidas en los planes para esta etapa, dando prioridad a aquellas relacionadas con la protección de la población y los recursos materiales, teniendo como base las experiencias dejadas por el huracán Sandy, que en octubre de 2012 devastó la ciudad de Santiago de Cuba.
Ya se puntualiza la movilización de brigadas quirúrgicas que partirán a municipios como Guamá y Tercer Frente, en los cuales las penetraciones del mar, la crecida de ríos, y el deslizamiento de tierra interrumpe el paso hacia esos territorios.
Gestantes de alto riesgo y pacientes con tratamiento de hemodiálisis que residen en zonas lejanas de los centros hospitalarios son ingresados con premura para garantizar su atención oportuna.
El acopio y distribución de productos agrícolas, la agilización de la recogida del café maduro, el traslado del ganado a zonas seguras, la poda de árboles, la desobstrucción de tragantes, desagües y canales, el alistamiento de instalaciones que pudieran servir como centros de evacuación de la población, son acciones que también se materializan en los nueve municipios de la provincia.
Del mismo modo se da prioridad a la producción y venta de galletas, pan y otros surtidos alimenticios, con horarios extendidos en los centros comerciales que los expenden.
Aunque las horas matutinas de este miércoles 6 de septiembre transcurren con cielo despejado, sol y el normal desarrollo de las actividades laborales y escolares, los pobladores de la suroriental Santiago de Cuba no se confían, y con ecuanimidad adoptan las medidas necesarias para reducir al mínimo las posibles secuelas del huracán Irma en su trayectoria por la geografía cubana.
