Nuevas modificaciones a la política para el proceso de entrega de tierras estatales ociosas en usufructo fueron dadas a conocer por Eddy Soca Baldoquín, director de suelos y control de la tierra, del Ministerio de la Agricultura, en conferencia de prensa.
Como principales elementos sobresale la autorización a las personas naturales que reciban tierras o ya la poseen para que se puedan vincular e integrar a empresas agropecuarias, azucareras o forestales.
De igual modo se prevé continuar la entrega de tierras en usufructo con el fin de asegurar el principio de que se mantengan en explotación,, evitar el mal uso del suelo y la pérdida de su agroproductividad, indicó el funcionario.
Será autorizada la entrega a personas naturales de terrenos ociosos de la ganadería comercial para las producciones de cría y ceba de ganado vacuno, hasta que se demande la utilización según el programa de desarrollo ganadero y no entregar las tierras destinadas a la producción de leche que tienen su programa.
Soca informó la ampliación del plazo de la vigencia del usufructo de tierras para todas las personas naturales de 10 a 20 años, prorrogables sucesivamente por igual término y para las personas jurídicas por tiempo indefinido (actualmente es 25 años), siempre que cumplan con las obligaciones pactadas.
El área máxima a entregar a las personas naturales que solicitan tierras por primera vez se incrementa de 13,42 hectáreas a 26,84 (2 caballerías) y queda establecida igual extensión para las solicitudes con destino a la ganadería mayor y cultivos a realizar en polos productivos. Está previsto que el área máxima a utilizar por una persona natural sea de 67,10 hectáreas (5 caballerías) siempre que las condiciones lo permitan.
La siembra de alimento animal en una parte de las tierras entregadas para el ganado mayor –explicó- constituirá obligatoriedad para satisfacer las necesidades alimentarias de la masa que posee. Queda establecido incorporar como nueva causa de extinción del usufructo la utilización de financiamientos ilícitos en el desarrollo de las fincas.
Forma parte de las modificaciones instituir para todas las personas naturales que el otorgamiento de tierras en usufructo se condiciona a aquellas que puedan trabajar y administrar de forma personal y directa.
También puntualizó que la autorización para la construcción de bienhechurías aumentará hasta un 3 por ciento del área asignada en usufructo para las producciones agropecuarias y forestales que lo requieran y previa aprobación de las autoridades correspondientes.
Acerca del cobro de tributos sobre la tierra, Soca adelantó que en fecha próxima se pondrá en práctica la aplicación gradual en los municipios de los impuestos previstos en la Ley Tributaria en lo concerniente al uso, protección y ociosidad de las mismas.
Anunció que está previsto un proceso de capacitación dirigido a todos los que intervienen en el proceso a partir de que sea aprobada la norma jurídica sobre estos temas.
A pregunta de los periodistas informó que hoy permanecen en las tierras ociosas más de 151 mil personas en 1,2 millones de hectáreas como resultado de los Decretos Ley 259 y 300.
Se refirió al impacto de esta forma de producción en los hogares cubanos al señalar crecimientos anuales en cultivos como arroz, maíz, frutales, leche y frijoles, aunque aún no cubren las necesidades de la población.
Dijo que las modificaciones aprobadas son el resultado del reclamo y propuesta expresadas por campesinos y sus representantes en reuniones efectuadas en diferentes niveles y forman parte de la actualización del modelo económico cubano.