Reafirmamos al pueblo cubano que jamás le dejaremos solo, expresó en rueda de prensa el reverendo Luis Barrios, coordinador del grupo auspiciado por la Fundación Interreligiosa para la Organización Comunitaria (IFCO)-Pastores por la Paz.
En la sede del Instituto Cubano de Amistad con los Pueblos, el líder religioso calificó de ilegal e inmoral el aún vigente cerco norteamericano que data desde hace más de 50 años, y cuyo levantamiento aún perciben como uno de los principales retos de esa plataforma, surgida en 1988.
Aseguró que Pastores por la Paz “no se sentará a observar que atenten contra la dignidad del pueblo cubano”, mientras argumentó que también lucharán por que los estadounidenses puedan viajar libremente a Cuba, y por el cierre de la ilegal base naval norteamericana en Guantánamo, una “afrenta a la soberanía” de la nación.
El también profesor de Psicología, Criminología, Estudios Latinoamericanos y Latinos en la Universidad John Jay College of Criminal Justice-CUNY, de Nueva York, transmitió un mensaje al presidente de EE.UU., Donald Trump, quien anunció en junio último un cambio de política hacia la Isla.
Agregó que al margen de las nuevas regulaciones sobre Cuba que serán emitidas el 15 de septiembre próximo por el Departamento del Tesoro norteamericano, el proyecto Pastores por la Paz continuará en pie y no va a ceder a presiones, porque “el amor es su licencia y máxima inspiración”.
El reverendo aseguró que “no les preocupa lo que les espera” al llegar próximamente a EE.UU., porque regresarán “con la frente en alto, y la mantendremos bien en alto”, sostuvo.
Al ser interrogado por el trabajo de esa plataforma interreligiosa en EE.UU., Barrios puntualizó que lo primordial es romper el bloqueo de la desinformación de ese pueblo, así como también en el seno del Congreso norteamericano.
Esas son nuestras armas más fuertes: educar y despertar la conciencia, organizar políticamente y movilizar, agregó el activista.
Gail Walker, directora ejecutiva de IFCO-Pastores por la Paz, apuntó que la actual visita a Cuba expresa la continuidad de la solidaridad con la Mayor de las Antillas, y que mantendrán el propósito de regresar a su tierra para dar a conocer la realidad de la Isla.
La hija de Lucius Walker, quien fuera creador y líder del proyecto, sostuvo que la intención es seguir viajando a Cuba “sean cuales sean los riesgos que podamos afrontar”, al referirse a las represalias que pudiera tomar la administración Trump contra los caravanistas.
Joel Suárez, coordinador ejecutivo del Centro Martin Luther King, se refirió a los estrechos lazos entre Cuba y Pastores por la Paz, expresión del apoyo de una numerosa parte de la comunidad norteamericana y a nivel mundial por el logro de mejores relaciones entre La Habana y Washington.
La actual edición de la Caravana, integrada por 28 personas, la mayoría estadounidenses, desarrollará en la Isla hasta el jueves próximo un amplio programa, que incluye su participación en los festejos por el Día de la Rebeldía Nacional, el 26 de Julio, cuyo acto central se efectuará en la occidental provincia de Pinar del Río. (Tomado de ACN)
